septiembre 08, 2009

Grupo Democracia Revolucionaria. Para el debate en el MLN

DESPLAZAR A LA OLIGARQUÍA EN EL MARCO DE UNA CRISIS ORGÁNICA DEL ESTADO MEXICANO

De qué país estamos hablando
México fue el único país latinoamericano en donde una revolución burguesa triunfó. Eso permitió que la oligarquía local pudiera, desde los años 20 hasta 1982, negociar mejor que sus vecinos del sur la relación de dependencia con el imperialismo norteamericano, pero de ninguna manera romper esta relación.
La manera que las economías dependientes tienen de subsanar las desigualdades competitivas en el mercado internacional, donde concurren burguesías con un alto nivel tecnológico en sus procesos productivos, es recurriendo a la sobrexplotación de los trabajadores o extracción de plusvalía absoluta, consistente no en inversión tecnológica, sino en incrementar horarios y o ritmos de trabajo y al mismo tiempo deprimir lo más posible los salarios.
En este esquema de explotación, obviamente no puede haber mercado interno, por lo que desde Cárdenas y hasta López Portillo, la imposibilidad de las clases trabajadoras para adquirir todo tipo de bienes y servicios, era parcialmente subsanada por la intervención estatal en salud, educación, alimentación y vivienda. Esa mínima distribución de la riqueza era controlada por el sistema corporativo del PRI gobierno. De esa manera, el Estado mexicano hizo manejable el descontento producido por la inequidad estructural.
Al mismo tiempo, los gobiernos post revolucionarios, sabedores de que la burguesía mexicana era incapaz de llevar a cabo un plan nacional de desarrollo industrial, impulsan diversas industrias estatales, además de políticas financieras que ayudarán, en ambos casos, a que la burguesía nacional se desarrollara.
La fuerte intervención estatal en la economía y la distribución era acompañada por una política antiimperialista - si era pactada con Washington o no, es irrelevante para el caso – que las izquierdas podían aprovechar para presionar en ese sentido.
Cuando los jóvenes priistas posgraduados en Harvard tomaron la Presidencia de la República, la estructura económica dependiente sobreexplotadora no cambió, pero la política regulativa y social del gobierno sí, reduciéndose al mínimo su intervención, acorde a los planteamientos neo liberales. Los efectos se percibieron inmediatamente entre la población: La respuesta de las izquierdas fueron dos paros cívicos nacionales, uno en 1983 y otro en 1984, así como el triunfo electoral de Cuauhtémoc Cárdenas en 1988.
Desde 1982, la precaria redistribución de la riqueza instaurada por el cardenismo, prácticamente ha ido desapareciendo. El programa Solidaridad iniciado por Salinas, frenó parcialmente el descontento, pero desde luego no era un intento de retornar a la anterior institucionalidad, fue pensado y ejecutado simplemente cómo una manera de reforzar el corporativismo. Las versiones posteriores de Solidaridad, hasta llegar al actual programa social de Calderón, cuentan con un presupuesto, logicidad e impacto mucho menor. En síntesis, los componentes de la sobrexplotación estructural de siempre se acentúan, en tanto que las políticas gubernamentales de distribución de la riqueza se reducen cada vez más.

Crisis Orgánica del Estado mexicano
Las izquierdas mexicanas han sido incapaces de sostener el poder cuando candidatos de centroizquierda han ganado las elecciones (1988 y 2006), tampoco han podido desplazar a la oligarquía por ningún otro medio, ni siquiera han podido frenar contrareformas lesivas a los trabajadores y sus familias. Por lo que no ha sido posible regresar al modelo de distribución parcial de tipo corporativo, o avanzar hacia la instauración de otro de corte democrático participativo que abran la posibilidad de un desarrollo no subordinado y distribuyan la riqueza. Esto ha sido una victoria en lo inmediato para la oligarquía, pero al mismo tiempo significa el agravamiento de la situación social en la que se asienta su dominio, pero a tal grado que pone en peligro su dominación.
En este contexto, la solución de las clases populares ante la exacerbación de la miseria acumulada durante 27 años, ha sido mayoritariamente individualista; sea migrando a los Estados Unidos o en menor cantidad, dedicándose a algún tipo de ilícito. Recientemente la crisis financiera se ha convertido en una crisis de producción, los cierres de plantas productivas y de servicios, pequeñas, medianas y grandes, sean de de capital foráneo o nacional se cuentan por centenares, lógicamente el empleo y el consumo se encuentran en su mínima expresión, por lo que últimamente muchísimas personas se enganchan a los cárteles de las drogas, quienes tienen múltiples actividades y controlan además otros giros delincuenciales. El Ejército y la Policía Federal, pilares del gobierno de Calderón, son una válvula de escape temporal al desempleo y al mismo tiempo, funcionan como curso propedéutico de ingreso al narco.
Hablamos entonces de una sociedad muy descompuesta, en donde buena parte de las clases populares no volcaron su odio contra la oligarquía, que es la causante de su miseria, sino contra las propias clases populares, distribuyendo drogas, robando, matando, exigiendo protección y secuestrando por sumas pequeñas, pagables en sus propios entornos. No se trata en su mayoría, de negocios criminales individuales, familiares o vecinales, la delincuencia está ahora monopolizada por unos cuantos cárteles con territorios y giros bien delimitados; es prácticamente imposible operar al margen de ellos, quién delinque en el territorio de un cártel, es inmediatamente aniquilado o incorporado a este de manera subordinada.
Contrario a versiones fantasiosas, el narco no tiene un plan para tomar directamente el poder del Estado, pues sólo es un grupo de empresarios - eso sí, muy poderoso - que funcionan como grupo de presión contra el gobierno, haciendo pactos con él o combatiéndolo cuando protege a algún rival de negocios y como tantos otros empresarios, también compran o amenazan servidores públicos y pagan campañas electorales. Cómo cualquier otro burgués, invierten sus ganancias en otros negocios.
Por lo tanto, el dinero del narco – y la red de complicidades que lo acompaña - está dentro de los tres niveles de gobierno y su capital está invertido en diversas industrias legales e ilegales así como financieras, estando coludido con empresarios y gobernantes. El hecho que el narco sea co propietario del capital nacional, no de manera específica, sino diversificadamente es el principal elemento para entender la imposibilidad de un triunfo militar sobre los cárteles.
El Ejército, al inicio de la actual administración de facto, gozaba de la aprobación de muchos mexicanos, ahora tras de tenerlo tres años en las calles y campos, sufriendo los daños colaterales o los abusos de la tropa y ante los magros resultados en la lucha contra el narco; va en declive su aprobación.
El sistema electoral, incluyendo partidos y el de impartición de justicia están más que desprestigiados, los respectivos aumentos propuestos a sus presupuestos coronan el repudio generalizado.
La iglesia católica está en una crisis de credibilidad enorme, como factor de control ideológico aún pesa, pero mucho menos que el duopolio televisivo.
Los bancos, más allá de que objetivamente nunca han tenido vocación de banca de desarrollo, centrándose en otorgar crédito al consumo a las tasas más altas del mundo, son percibidos por la población como verdaderos vampiros.
En otro frente, la deserción ideológica del gobierno federal de las labores reales de contención de la miseria ¡en plena recesión! mediante el incremento del gasto social, aunque no hubiera institucionalidad que lo respalde, agrava el descontento y la falta de legitimidad del grupo gobernante. Increíblemente, Calderón y Carstens obtienen en crédito 30mil md de la Reserva Federal y 47mil md del FMI, o sea 77mil md, pero recortan el presupuesto en 85mil md.
Los préstamos internacionales no van al sector productivo, no se destinan a inversión en infraestructura, mucho menos a programas sociales, se están utilizando para rescatar al sector financiero, que como vimos, ¡no tiene vocación de banca de desarrollo! Washington les arrojó un salvavidas para que aplicaran una versión mexicana de los lineamientos de Obama, y no lo quisieron ver. En términos de llevar una elemental administración de un Estado capitalista en periodo de crisis, el gobierno de Calderón está por debajo de los estándares. Su ortodoxia monetarista no se aplica ya en ningún lugar del planeta: La autonomía de BANXICO nos hunde como país (y a ellos como élite gobernante), parte de los 76 mil 375 md de la actual reserva serán gradualmente entregada al mercado cambiario, para que los especuladores no productivos los aprovechen e incluso saquen dólares del país.
Vemos entonces que los manejos estructurales e infraestructurales, es decir, en todo el bloque histórico, acumulan a los descoordinados pero múltiples brotes de resistencia social y a una opinión pública adversa.
Todos estás particularidades del Estado mexicano hacen que ninguna institución gubernamental o privada, excepto el duopolio televisivo, esté construyendo –parcialmente- consenso (hegemonía) entre los de abajo a favor del sistema. Televisa y TV Azteca son organismos integrantes del Estado mexicano y funcionan, tan bien, que de no ser por ambas televisoras, el ejército no podría sostener al gobierno de facto tras las inequitativas y torpes (las dos características a la vez) políticas económicas y el nulo funcionamiento de todo el entramado institucional civil y gubernamental.
Pero el barco hace agua y solamente funciona una bomba, por lo que está entrando más agua de la que pueden sacar. Hay una Crisis, no sólo del financiamiento, producción y consumo, sino Orgánica, de casi todo el Estado mexicano, incluyendo a las instituciones pertenecientes a la sociedad civil que fabrican consenso. Una crisis infraestructural y de las instituciones que legitiman el sistema, una crisis de todo el bloque histórico según Gramsci, o visto otro ángulo, tenemos un Estado fallido. Las preguntas que pretendemos contribuir a resolver son: ¿Qué van a hacer ellos? y ¿Qué debemos hacer nosotros?

Cómo piensa salir de la actual crisis orgánica la oligarquía
La crisis económica y política generalizada del Estado mexicano, incrementa el descontento popular, ante esto, el régimen ya se apoya fuertemente en la presencia policiaco – militar para gobernar en algunas zonas del país, pero las fuerzas represivas aún no son el único sostén del régimen, ni el más importante: las dos televisoras - con diferencias entre ellas – son lo único que los mantiene a flote, por eso la regresiva ley de medios.
Desde luego no esperarán a que el recurso ideológico mediático pierda credibilidad, necesitan fortalecer su dominio ideológico, reforzar otros agentes de la fabricación del consenso antes de que tengan que usar generalizadamente tanto el aparato jurídico que criminaliza la protesta social, así como las fuerzas represivas y el asesinato selectivo de dirigentes.
La oligarquía necesita algo más que un cambio de equipo en la Presidencia para salir de esta crisis. Para evitar que un bloque opositor instaure un modelo de distribución del ingreso e inicie el largo proceso de desarticulación dependiente de nuestra economía a la del imperialismo, necesita una refuncionalización del Estado, desde arriba.
Los reclamos sociales son tan fuertes que necesitan realizar una Revolución desde arriba, o Revolución Pasiva; cambios en el funcionamiento institucional, que signifiquen un cambio en la cotidianeidad de la población, en parte de manera real y en parte en su percepción de que las acciones lo benefician. La oligarquía necesita una nueva élite política que impulse masivamente obra pública, créditos y reparto populista- corporativo de uniformes, útiles escolares, alimentos y materiales de construcción a las clases populares, sea a través del gobierno o del partido, cómo en los mejores tiempos de Luis Echeverría. Necesita también que la clase media perciba que mejora la seguridad, al menos en su entorno inmediato.
En un ambiente de miseria y violencia, y con referentes de izquierda dispersos, un candidato presidencial carismático, que convenza a las clases populares que les puede brindar satisfactores inmediatos y a las clases media y alta relativa seguridad, no sólo será votado masivamente, sino que las masas estarían dispuestas a tolerar que restrinja libertades democráticas fundamentales.
Esa es la manera en que Álvaro Uribe llegó a la presidencia y así se ha sostenido, sí por medio de un ejército genocida financiado por USA, pero fundamentalmente porque aunque es parte del narco e impulsa la violencia paramilitar, los medios de comunicación han convencido a media Colombia que él es la solución. Magnificando mediáticamente la obra social entregada, y sobre todo, los logros que su gente en la alcaldía de Medellín han tenido en materia de seguridad.
Peña nieto reúne todos los requisitos de Uribe. El laboratorio del Estado de México indica que la promoción mediática de los compromisos cumplidos en su gobierno lo puede llevar a la Presidencia fácilmente. Además, si logra reordenar – que no suprimir - el narcotráfico en México reduciendo la violencia pública a niveles aceptables, disfrazando los acuerdos con los cárteles como una estrategia centrada en la inteligencia y no como Calderón en los enfrentamientos en zonas urbanas, fortalecería su imagen en el país y quedaría bien con Washington. Como en Colombia, no tardaría en aparecer en cadena nacional explicando que los grupos opositores tienen nexos con algún grupo armado y este con el narco, por lo que es necesario restringir ciertos derechos que sirven a las redes de la delincuencia.
La opinión pública mayoritariamente avalaría la criminalización de la protesta social y las desapariciones forzadas de militantes con vida pública, tachados insistentemente por los medios como vinculados al narco, razón por la cual no se levantaría repudio masivo. Sólo falta que algún o algunos grupos armados se activen, para que Peña Nieto pueda presentarse ante el imaginario popular como la solución integral, ya que ni siquiera tendría que iniciar la guerra sucia, sino tan sólo continuarla mejorando procedimientos, criticando las formas de Calderón e inyectando obra social y programas de desarrollo en las zonas levantiscas.

Tareas para desplazar a la oligarquía frenando la restauración PRIista
Pero este panorama sombrío no es ineludible.
Un gobierno socialista es nuestro objetivo, pero aunque el Estado presenta una crisis orgánica, no hay posibilidad de transitar directamente del actual Estado capitalista bajo control neo liberal, a un Estado de transición hacia el socialismo bajo control de una dirección política socialista hecha gobierno.
Para dialogar con los socialistas infantiles. El problema no es de replanteamiento de los objetivos socialistas, sino de trazar un camino coherente para alcanzarlos, no en el papel, sino en la realidad y para ello se necesitan alianzas. Hablamos de valorar seriamente el volumen de fuerzas que necesitamos para desplazar a las direcciones políticas en las que confía realmente la oligarquía (PRI, PAN), y esto implica que los socialistas agrupados previamente en un Bloque Popular, tengan que aliarse con un cúmulo de fuerzas que no son socialistas, entre las que se encuentran además de organizaciones con composición popular y definiciones meramente democráticas, expresiones políticas de la burguesía nacional no articulada estructuralmente al modelo maquilador neo liberal, por eso muy golpeada, y en general expresiones patrióticas y antiimperialistas. Dentro de este Bloque Opositor deben estar ONGs, ecologistas, feministas, el movimiento LGBTT y las personas que no toleran más los secuestros y la violencia en general. A todos hay que intentar incluirlos con una propuesta particular que conecte con el planteamiento estratégico.
Unir al Bloque Opositor y hacer todo lo necesario para direccionarlo lo más posible a la izquierda no significa que lo forcemos a asumir un programa socialista, con abolición de la propiedad privada por ejemplo, sino a que sea consecuente con un programa patriótico y antiimperialista, para que una vez hecho gobierno, la nueva institucionalidad haga que la lucha por el socialismo sea más posible. Esa es la tarea central del Bloque Popular para este periodo.
Por eso es necesario convencer a la mayor parte de los agrupamientos socialistas y populares, que deben conformar el Bloque Popular, de que hay condiciones para desplazar a la oligarquía si combinamos movilizaciones de masas en las calles con lucha electoral en un frente donde nos encontremos con fuerzas no socialistas e incluso no populares:
La discusión con los compañeros que no ven una mediación entre la agitación - organización y la toma del poder por parte de los socialistas, debe abordarse en varios planos y exponiendo nuestro planteamiento desde varios ángulos, convenciendo y cercando discursivamente.
En el análisis nacional: El PAN pasa a tres años del fraude electoral de 2006 a ser oposición y el PRI tendrá un desgaste ineludible al ser mayoría en el congreso, y por tanto el responsable de las políticas que se implementen en el país, pero para aprovechar eso necesitamos que el Bloque Opositor sea inmenso y que se cree pensando en derrotar a la oligarquía en 2012.
El Bloque Opositor cotidianamente debe indicar al pueblo la conexión entre los movimientos políticos particulares del PRI y el proyecto general de la oligarquía, ayudando a desenmascarar la revolución Pasiva que fraguan. Como parte de esto, debemos exigir la revocación de mandato de Calderón y la anticipación de elecciones, a fin de evidenciar que el PRI no está dispuesto a que esto se vote en la cámara de diputados, haciendo patente a la población que se están cubriendo los dos partidos las espaldas.
Otra tarea del Bloque opositor es coordinar todas las luchas populares y democráticas contra la oligarquía y sus aparatos de control: si se impulsan al mismo tiempo tomas de tierras, oficinas gubernamentales huelgas sindicales, tomas de fábricas, paros estudiantiles y movilizaciones populares se estaría construyendo un poder paralelo, con el objetivo de fortalecer los objetivos del Bloque Opositor, pero dirigido por las fuerzas populares y socialistas, es decir, por el Bloque Popular. De esta manera contaríamos con el instrumento para
1. Empujar a las direcciones timoratas a sostener el triunfo electoral y
2. Obligar al nuevo gobierno federal – del que tenemos que ser parte- a cumplir el programa patriótico y antiimperialista y a iniciar la transformación del actual Estado hacia una democracia protagónica y participativa, desde donde la lucha de clases tenga un mejor terreno para pugnar por el socialismo.
Un extenso Bloque Opositor puede hacer creíble a la población que sus demandas pueden ser resueltas efectivamente por un proyecto democrático y antiimperialista que sin duda defenderá su triunfo electoral (ver parte referente a comunicación). Pero únicamente el correcto posicionamiento del Bloque Popular dentro del Bloque Opositor, es la garantía de la defensa activa del voto.
En el análisis internacional. Extrayendo las enseñanzas de las experiencias recientes en diversos países de América Latina, encontrando las particularidades mexicanas, pero insertando al país, por sus características, en el universo de los Estados dependientes de la región.
El MLN necesita un centro que procese y difunda para los mexicanos, militantes o no, las experiencias de desplazamiento de las oligarquías latinoamericanas. (Ver parte referente a comunicación) Las tesis a desarrollar se simplifican en:
1.Es posible desplazar a las oligarquías más férreas, primero del gobierno, y a partir de esto, iniciar una lucha real para quitarles el poder. A condición de que inicialmente el Bloque Popular éste cohesionado. Así ocurrió en Venezuela, Bolivia y Ecuador.
2.Pero las fuerzas del Bloque Popular no han alcanzado para desplazar a la oligarquía, han tenido que establecer un frente más amplio, es decir un Bloque Opositor con objetivos democráticos, patrióticos y antiimperialistas, pero de manera tal que el Bloque Popular quede lo mejor posicionado dentro del Bloque opositor. (en Venezuela, el MBR de Chávez copó el MVR)
3.Ha sido necesario que el Bloque Opositor impulse un fuerte movimiento nacional reivindicativo coordinado, luchando en las calles y que al mismo tiempo tome en sus manos la organización de la campaña electoral y después la defensa del voto.
4.Desplazadas las oligarquías del gobierno, inicia el proceso de consolidación del cambio y la lucha por el socialismo comienza a ser una posibilidad real. Por eso las oligarquías inician la labor, primero de fractura del Bloque Opositor, después de acoso mediático y terrorista coordinado con el imperialismo. Incluso los procesos antiimperialistas no son asimilables por los imperialismos norteamericano y europeo, debido a que como al mismo tiempo son democráticos, empoderan a la población, por lo que no pueden quedarse mucho tiempo en este nivel, pues los nuevos gobiernos se desprestigian ante las masas. Con sus direcciones políticas hechas gobierno o sin ellas, los pueblos tienden a luchar en estos nuevos escenarios por el socialismo masivamente.
En relación a cómo abordar a los elementos no socialistas o no populares que deben conformar el Bloque Opositor, hay algunos que serán atraídos por las propuestas y el desarrollo de un trabajo masivo y muy visible, pero hay otros que no desean estar en Bloque Opositor donde los socialistas no están atomizados y subordinados.
Basándonos en que corrientes como la estructura de AMLO no desea alianzas, será preciso determinar de qué manera se le cerca para que se integre (aunque esta integración podría tomar la forma de una integración nuestra a la campaña).
Partiendo realistamente de que únicamente podrían ser candidatos Ebrard u Obrador, si es el primero podría ser más fácil una alianza, pero si todo indica que será Obrador el candidato, una opción podría ser que el naciente Bloque Opositor lo proponga, públicamente, en un acto ciudadano con sus bases y las nuestras, como candidato presidencial antes de que las estructuras del gobierno legítimo y el FAP lo hagan. De manera que los costos políticos a pagar frente a sus bases, si rechazara un apoyo tan masivo, lo obligaran a aceptar nuestra presencia.
En un escenario como el anterior, la presencia de elementos del Bloque Popular en las estructuras del movimiento obradorista, en el PRD, PT y Convergencia fortalecería nuestros objetivos y haría más fácil el poder obtener diputados que ayudaran al movimiento en las calles a empujar hacia la radicalización del proceso.
Otra manera podría ser impulsar una candidatura independiente (la idea de una figura defensora de los derechos humanos es buena) que decline en la recta final. Esta opción hace que las bases del candidato con registro (Ebrard u Obrador) nos perciban como un obstáculo, impidiéndonos ganar su confianza para combatir posibles flaquezas de sus direcciones. Y si se declina muy pronto, no tiene sentido hacerla, no acumulamos fortaleza política.
Comunicación. En una crisis orgánica del Estado, donde la única institución que eficientemente fabrica consenso entre la población respecto de la dominación oligárquica es el duopolio televisivo, nuestras tareas son minimizar su impacto, para incrementar cualitativamente la conciencia de la crisis orgánica y la posibilidad de la salida entre los de abajo, tanto entre los organizados, los q podamos organizar y los que no podamos organizar, (el ciudadano del metro, opinante y votante)
Para ello necesitamos una estrategia mediática que exprese nuestros posicionamientos políticos generales y se posicione cotidianamente frente a medidas particulares del Estado mexicano, además de tener capacidad de respuesta mediática a los efectos desmovilizadores de una posible séptima declaración de la selva lacandona. Adelantamos algunas tareas concretas:
Prensa masiva propia. La Prensa de las diferentes organizaciones que componen el MLN, no alcanza para los objetivos planteados. Necesitamos un semanario que se pueda distribuir masivamente por una red de vendedores que obtengan un porcentaje de la venta. Cómo lo hizo Corre la voz y lo hace Machetearte. Además de la distribución del periódico por parte de las organizaciones integrantes.
Periódico mural quincenal. Adherible o sencillo.
Mapa de espacios radiofónicos. A los que es posible asistir o llamar al aire para discutir algunos de los planteamientos del MLN.
Ganar espacios mediáticos. Acciones simbólicas sobre diferentes tópicos, las movilizaciones convencionales no deben ser nuestra única expresión. Por otro lado, también necesitamos ganar – en diferentes grados - académicos, intelectuales progresistas, artistas y comunicadores prensa, radio, TV e internet, en México y el extranjero. Urge meternos a la conmemoración del centenario y el bicentenario, organizando actividades propias (cine debate, teatro, conferencias, publicaciones, encuentro latinoamericano de organizaciones políticas y sociales en México) y participando en las que organiza el mundo académico y político con nuestra posición propia. Se trata de meternos realmente a la disputa por la hegemonía cultural.
Fuera de las actuales fronteras del país. Ningún desplazamiento de la oligarquía se ha dado históricamente sin la combinación de presión política interna y externa: Núcleos del MLN y del Bloque Opositor en el suroeste norteamericano, y redes de apoyo en Europa, como las que tienen los zapatistas, además de suramerica. La tarea es más fácil de lo que parece, tenemos el planteamiento histórico político y los contactos, pero debe iniciarse ya. Las manifestaciones o plantones de embajadas mexicanas, nos posiciona fuertemente en el ámbito nacional.
Importante definición a tomar. Mientras construimos el Bloque Popular y el Bloque Opositor, la desesperación del pueblo puede producir estallidos sociales, si se trata de saqueos a trenes de granos, o supermercados, al régimen le será difícil – aunque no imposible - criminalizar luchadores sociales, porque ese tipo de acciones, en el contexto de la crisis, son toleradas y hasta aplaudidas por la mayoría de la opinión pública. Pero si se trata de acciones armadas en las cuales el objetivo es enfrentar a las fuerzas policiales y al ejército, sin juzgar las causas, la mayor parte de la población percibirá esto como otra variante de la violencia que se suma a la generada por el narco; la gente de este país simplemente no quiere más balaceras en sus calles y campos.
Sobre este rechazo sensible del pueblo, el gobierno no sólo podría criminalizar injustamente a luchadores sociales que están dentro de la legalidad, sino que además el decadente Estado mexicano podría fácilmente rearticular el movimiento de blanco contra la violencia, con su enorme cauda mediática, para golpear a todas las izquierdas en vísperas del 2012 y articular en torno a su proyecto a la clase media media y media alta que desean seguridad al precio que sea. Desde luego que las marchas las encabezaría física o mediáticamente Peña Nieto, presentándose como el gobernador que se atrevió a meter en cintura a los Atencos y el candidato que aniquilará el duo narco - guerrilla.
Al imperialismo y al Estado mexicano le interesa que en estos momentos un movimiento armado entre en acción. Las calles las ocuparía el ejército, no los movimientos político - sociales .
El MLN debe pronunciarse públicamente al respecto.
Sugerimos que el MLN adopte el lema “Militantes de la Unidad” y lo integre a su logotipo.
Finalmente, valoramos positivamente las exposiciones de todos los agrupamientos que conforman el MLN y nos declaramos deudores de muchos de sus posicionamientos. No hemos hecho sino profundizar en un debate ya abierto.

1 de septiembre 2009.

agosto 15, 2009

Aportación del PPS de México al debate interno del MLN

Estimadas compañeras, estimados compañeros del MLN:

Habiéndose dado ya varias intervenciones de organizaciones hermanas antes de la nuestra, reiteramos que hemos confirmado una vez más que tenemos numerosas coincidencias de fondo con todos los expositores, sin excepción. Resaltamos algunas de las fundamentales:

COINCIDENCIAS FUNDAMENTALES EN EL SENO DEL MLN
1. Coincidimos con el compañero Marcos Tello, de Ediciones del Poder Popular, en que existen condiciones para que en México, como en general en nuestra región, América Latina, se produzcan hoy victorias populares por medios pacíficos, fundamentalmente. De hecho, se están produciendo.
2. Coincidimos con el compañero Camilo Valenzuela, de REDIR-MLN, en que nuestro Movimiento de Liberación Nacional debe ser un destacamento de poder popular, entendiendo que sólo se puede hablar seriamente de poder popular cuando se habla de la toma del poder público por parte de las fuerzas populares.
3. Coincidimos con los camaradas Omar Garibay y Molay Maza, del Partido Comunista de México, marxista-leninista, en que vivimos un periodo de acumulación de fuerzas que ha tenido varias expresiones en los últimos años… La necesidad perentoria es la unidad de todos estos procesos nacionales… y muchos otros que actúan de manera local.
4. Coincidimos con los compañeros del Frente Social por la Soberanía Popular, cuyo vocero fue el camarada José Santos Cervantes, en que nuestras luchas deben ser unitarias, de la clase trabajadora en su sentido amplio y de todos los sectores populares agraviados por el imperialismo.
5. Coincidimos con el compañero Benito Mirón Lince, del MONAE, y los demás compañeros de la misma organización y de la Alianza de Tranviarios de México, en que siendo válidas todas las formas de la lucha popular, sin embargo es necesario precisar cuál forma o cuál combinación de formas es la prioritaria en cada momento concreto.
6. Coincidimos con todos los expositores de organizaciones hermanas en que no necesitamos cambios superficiales, sino profundos, porque el saqueo de las riquezas del país por las corporaciones transnacionales; la expoliación de la clase trabajadora por parte del capital extranjero y local; las injusticias sociales cada vez más extremosas; las contradicciones en el seno de la sociedad, agudizadas ya en alto grado, todo eso determina que el camino de las reformas paulatinas carezca de sentido y porvenir, hoy más que nunca. Por eso, nadie las ha propuesto ni las ha defendido en este debate interno. El de las reformas paulatinas es un camino que nadie sustenta, en el MLN.
7. De igual manera coincidimos con todas las organizaciones que han afirmado que un cambio profundo, como el que se necesita, exige arrebatar el gobierno, en lo inmediato, a la clase social que ahora lo detenta –no nos bastaría con cambiar al empleado incómodo actual- y luego, arrebatarle todo el poder.
Sólo son algunas de las coincidencias más significativas, no todas, hay muchas más. Ahora, sobre cómo vamos a avanzar hacia esos objetivos, ¿qué opinamos? ¿Qué es lo prioritario en las condiciones de hoy de nuestro país y en el contexto latinoamericano, continental y mundial?
8. Varios de nuestros compañeros han coincidido en postular que la combinación de la lucha electoral, la batalla parlamentaria y el movimiento de masas, es la que debemos priorizar en este momento concreto. Ésta ha sido una tendencia dominante en el debate interno antes de hoy. El PPS de México no rechaza la idea de tajo, le ve posibilidades bajo ciertas condiciones; estamos aquí para buscar acercamientos y construir consensos. Exploremos esa combinación en la perspectiva del 2012, empezando por los partidos electorales “grandes”, sus precandidatos y posibilidades; y, sobre todo, por lo que representan unos y otros ante nuestra lucha contra el neoliberalismo y por la liberación nacional.

EL MLN, 2012 Y LA VÍA ELECTORAL, UN PRIMER ACERCAMIENTO
9. El PAN, partido en el gobierno, carece de figuras para postular a la presidencia. Además, está desgastado y sus perspectivas de recomponer sus posibilidades con vistas a la próxima elección federal, son escasas. Ahora, sobre lo que representa ese partido, seguido hay confusiones, entre otras cuestiones porque en la esfera electoral lo que prolifera es el oportunismo y éste genera definiciones “a modo”, según se le quiera a ese partido como aliado o se le vea como adversario en una u otra coyuntura. No podemos guiarnos por ese tipo de análisis convenenciero, sino por uno sustentado. Dos datos duros para ubicar al PAN como lo que en verdad es y los intereses que representa, son éstos: en ese partido milita la ultraderecha en todas sus expresiones en el caso de México, como el Yunque y media docena más. También es el eslabón aquí, de la hermandad internacional que agrupa a lo más granado de la extrema derecha fascista y pro-fascista del mundo, entre otros, el Partido Popular de España, de Aznar, heredero del franquismo; la mafia cubana de Miami y la derecha golpista de Venezuela. Y hay que tener presente que los gobiernos panistas han sido y son el referente fraterno en el continente del gobierno narco-paramilitar de Álvaro Uribe, de Colombia, el principal esbirro de los yanquis. Otros elementos de valoración son las conductas de los gobiernos federales del PAN, el de la “pareja presidencial”, de Fox, y el de Calderón; también las de sus gobiernos estatales –Jalisco, Morelos, todos- comportamientos que muestran el PAN tal como es, lacayuno frente al imperialismo y la gran burguesía, y enemigo frontal de la clase obrera y las fuerzas populares; brutal represor, como los peores elementos del PRI, y fascistizante, por razones de clase social y, en este caso, por arraigada convicción ideológica que viene de décadas atrás, no sólo en el caso de la ultraderecha panista, sino también en el caso de su corriente, dijéramos, “civilizada”, puesto que una y otra tuvieron su matriz histórica en la Falange española y el nazifascismo de Hitler. Por todo eso, es evidente que debemos echarlo del gobierno federal y de todos los centros de poder, sin miramientos, y sin cometer la incongruencia de buscarlo como aliado a veces, por razones utilitarias, como lo han hecho diversos políticos de la burguesía y la pequeña burguesía, movidos éstos por apetitos propios de su clase y razones de cálculo electorero. Por último, debemos tener en cuenta que, a pesar de su desgaste, no podemos dar al PAN por ya derrotado; tiene en sus manos los recursos del gobierno; es la segunda fuerza electoral y posee grandes apoyos en el seno de la burguesía más acaudalada y reaccionaria. Echar a Calderón de la presidencia como demanda política, como se ha propuesto aquí, tiene sentido si su trasfondo es el de echar no sólo a ese individuo, sino al PAN con todo lo que representa, y, más todavía, echar a la clase social a la que sirven conjuntamente el PAN y el actual sistema de partidos.
10. El PRD tiene dos precandidatos principales: Andrés Manuel López Obrador y Marcelo Ebrard. El primero, muestra un claro desgaste, resultado del golpeteo intenso que le infligen la televisión y otros medios. No obstante, cuenta con una base popular muy numerosa –alrededor de dos millones- que le profesa lealtad en lo personal, no a partido ni institución alguna; su capacidad de convocatoria, aunque menor que antes, sigue siendo superior, con mucho, a la de cualquier otro individuo del ámbito político nacional, y posee un nivel de autoridad sobre sus seguidores, sin paralelo. Su desgaste, que se puede medir en las encuestas y, de algún modo, por el tamaño de las concentraciones populares que convoca, tiene su contraparte en su muy evidente corrimiento desde una posición cuando fue candidato presidencial de neoliberal de bajo perfil o “centroizquierda”, a un compromiso coincidente con las grandes demandas del movimiento popular contra el neoliberalismo, como la defensa del petróleo y la soberanía. En este aspecto, AMLO pasó de una posición ambigua a una definida, al lado correcto de la trinchera y, por lo mismo, las franjas de la pequeña burguesía que guían su voto por la propaganda televisiva abierta y encubierta, ya no sufragarían por él. Hubo un cambio con dos vertientes en este caso: perdimos un candidato con grandes posibilidades de triunfo electoral, aunque inconsistente en las cuestiones de fondo, pero ganamos un aliado virtual con coincidencias en esas mismas cuestiones. El segundo precandidato, Ebrard, desde su puesto de Jefe de Gobierno del DF, cuenta con una plataforma de impulso que nadie más posee en ese partido; se mantiene en la línea de la ambigüedad sobre los puntos medulares del debate antineoliberal, y sus equipos de promoción se despliegan por todo el país. Hay otros aspirantes casi sin posibilidades de alcanzar la nominación, como Lázaro Cárdenas Batel. En las condiciones del actual sistema de partidos, el PRD es lo más cercano a los intereses del bloque popular, pero no los hace suyos.
11. El PRI está en condiciones ventajosas para ganar la presidencia y la mayoría en el Congreso. Peña Nieto, su precandidato mejor colocado, es enemigo declarado de los intereses de las fuerzas populares y de los ideales de liberación nacional, a la vista de sus compromisos con el mercado internacional, que es el eufemismo preferido por quienes eluden llamar al imperialismo por su nombre. Además, es un represor bestial, como lo demostró en el caso de los compañeros del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra, y es aliado de personajes nefastos, como Salinas de Gortari y Elba Esther Gordillo, y de empresas tan negativas como las dos televisoras. Los otros precandidatos del PRI, como Beltrones, no son distintos, cojean del mismo lado. Ese partido hoy es botín de neoliberales y proimperialistas; en él hace tiempo que no tienen cabida los elementos de una burguesía nacionalista de otra época, como Lázaro Cárdenas. Nada queda de ellos en esas filas.
12. Precisando: ninguno de los tres partidos mencionados identifica su programa ni su práctica política con el MLN ni el movimiento popular. Tampoco los otros partidos menores con registro. El PRD es el menos distante de los anhelos e intereses del movimiento popular y de las fuerzas que resisten al neoliberalismo, pero el hecho de que aun así está lejos, se refleja en las percepciones que desde este lado de la trinchera se tienen de ese partido, y van, desde considerarlo como “el mal menor”, hasta verlo como algo del todo inaceptable, como lo hace Marcos, el Subcomandante. Hay que hacer la excepción de los compañeros del movimiento popular y del MLN que también militan en el PRD y ven a su partido con ojos más benignos; es comprensible que ellos lo vean así, y digno de fraternal respeto. Por lo que hace a los aspirantes presidenciales que están a la vista, el único que asume posiciones coincidentes con los del frente de masas y el MLN, es AMLO, con las desventajas ya dichas.
13. El movimiento popular no cuenta con registro partidario alguno que refleje sus aspiraciones e intereses y le permita participar en las elecciones, con su propio programa e identidad. Será deseable que lo obtenga, pero la ley fue reformada por consenso de los partidos del actual sistema y con el PRD como principal promotor, para impedir que alguien pueda obtener el registro electoral sino hasta después de 2012.
14. Por ahora, por lo que hace al marco jurídico-institucional, el MLN y el movimiento popular sólo pueden participar en ese tipo de lucha a) a través de los partidos con registro, o b) al margen de ellos, con su propio programa y sin registro, lo que implica que no le sean contados ni reconocidos los votos que obtenga.
15. Por cuanto al aspecto de su unidad e identidad, el MLN y el frente de masas pueden enfrentar el proceso electoral, c) sin cohesión ni identidad propia, actuando cada grupo y cada organización como lo crea adecuado, o d) con unidad y cohesión consensuada, por lo menos una buena parte de dicho movimiento, creando ciertos acuerdos y reglas que por hoy todavía no se han construido.
16. Si se decide participar electoralmente dentro del marco jurídico-institucional, el MLN y el movimiento de masas pueden hacerlo, e) con un alto nivel de cohesión e identidad propia, desde fuera de los partidos, pero haciendo alianzas negociadas y, por lo mismo, más o menos condicionadas con el o los partidos que sea viable, como pudieran ser el PRD, PT y Convergencia, y/o con quien escogiéramos de los precandidatos o candidatos a la presidencia, sea AMLO, Ebrard u otro, o f) desde dentro del PRD, formando una corriente interna propia, que actúe en el seno de ese partido con las reglas que rigen ahí, para bien y para mal.
Todo lo dicho en los numerales 14, 15 y 16, se refiere a la elección federal de 2012. Las de carácter municipal y, en cierta medida, las legislativas, se cuecen aparte en varios aspectos. Regresaremos un poco adelante al tema electoral.

EL DESARROLLO DEL SUJETO COLECTIVO COMO LA CUESTIÓN ESTRATÉGICA
17. Todas las organizaciones hermanas han dicho aquí que lo medular en este momento, es fortalecer y desarrollar al sujeto colectivo. Independientemente del nombre que cada quién le da al sujeto, todos coincidimos en que su importancia es substancial; citamos: “El Bloque Popular… debe desarrollar su propia fuerza, su propia capacidad con el objetivo de dirigir al Bloque Opositor y no diluirse en él” (Marcos Tello).”Es indispensable fortalecer al MLN” (Camilo Valenzuela). ”Lo fundamental en el periodo actual es consolidar el complejo proceso de Frente Único que ya despunta en el país”, (PCM m-l). “Lo deseable sería que hubiera la más amplia unidad entre todos estos frentes, pero también es verdad que la unidad se construye, no surge de manera espontánea” (FSSP). “Hoy el trabajo fundamental es construir el sujeto colectivo” (MONAE).
18. Estando de acuerdo plenamente con lo expresado por todas las organizaciones hermanas, ponemos a su consideración estas precisiones fundamentales de carácter teórico y práctico: a) La cuestión estratégica radica en desarrollar al sujeto colectivo y es, por tanto, la que condiciona las tácticas que se adopten. Dicho de otro modo, tenemos que asegurarnos de que toda decisión táctica contribuya al objetivo de desarrollar y fortalecer al sujeto colectivo y nunca a dividirlo ni debilitarlo; b) El objetivo estratégico indicado no es de largo plazo, sino de plazo medio y exige nuestra atención y acción inmediatas y concentradas; c) La acumulación de fuerza para vencer al enemigo se concreta precisamente en el desarrollo y fortalecimiento del sujeto colectivo; d) La acumulación de fuerza es de cantidad y calidad; e) La primera se concreta en un sujeto colectivo más numeroso, un número mayor de organizaciones y grupos, y masas más nutridas, participando en la lucha, en las movilizaciones, tomas, plantones y bloqueos; f) La acumulación de calidad se concreta en un sujeto que ya no se movilice sólo de manera espontánea ni movido por cuestiones de tipo gremial o de carácter economista; tampoco enardecido por corear consignas solamente, sino que lo haga sobre todo de manera programada, consciente y disciplinada persiguiendo un objetivo político, sea el de echar del gobierno a quien lo ha ejercido en contra de la voluntad y los intereses populares, en una fase primaria, o sea el de la toma del gobierno y del poder en sus propias manos, en una fase superior; g) Crear las condiciones subjetivas para el cambio profundo consiste en desarrollar y fortalecer al sujeto colectivo y eso no sucede de manera espontánea, es responsabilidad de las fuerzas más conscientes y organizadas. En este caso, el MLN debe asumir esa responsabilidad: sumar, educar políticamente, orientar con acierto, articular y organizar, ésas son nuestras grandes tareas h) El sujeto colectivo consta de un núcleo político también colectivo y altamente cohesionado, como el MLN, un bloque popular, más amplio y muy fraternal, y un bloque opositor todavía de mayor amplitud, en el que participan clases y sectores sociales no proletarios, de la burguesía y la pequeña burguesía, y en cuyo seno se expresa la ley dialéctica de la unidad y lucha de contrarios y se da una batalla de clases permanente por la dirección y el rumbo del movimiento todo; i) Debido a la naturaleza compleja del sujeto colectivo, integrado por diversas clases sociales y sectores de la población, su fortalecimiento y desarrollo conlleva un orden de prelación que, desde la óptica clasista y popular, debe ir de lo central a lo periférico. Es decir, el fortalecimiento del MLN tiene para nosotros prelación sobre el desarrollo del bloque popular, y éste sobre el desenvolvimiento del bloque opositor, j) Sin embargo, existe una retroalimentación dinámica entre los diversos elementos del sujeto colectivo, pues su interrelación no es mecánica sino dialéctica. En otras palabras, la prelación no es cronológica, no se trata de desarrollar y fortalecer sólo al MLN y cuando se concluya empezar con el bloque popular, y así sucesivamente; se trata de fortalecer todos los niveles del sujeto colectivo, prefiriendo, sobre todo en las cuestiones tácticas, todo lo que desarrolla y fortalece a un nivel central sobre uno periférico, y no al revés.
19. La tarea fundamental del MLN es la de contribuir al máximo de sus posibilidades al desarrollo y fortalecimiento, en cantidad y calidad, del sujeto colectivo que ha de desplazar del poder a la burguesía subordinada, y que ha de tomar el poder en sus manos. El MLN debe contribuir al desarrollo y fortalecimiento del bloque opositor y del bloque popular, con prelación sobre aquél, pero para lograrlo tiene que avanzar substancialmente en su propia construcción interna que implica sobre todo una mayor cohesión ideológica, teórica, estratégica y táctica, en cuya edificación ya estamos inmersos, pero exige nuevos pasos y mayores esfuerzos; también exige de una dirección colectiva muy ágil y eficaz y de un desarrollo orgánico suficiente.

EL DESARROLLO DEL SUJETO COLECTIVO Y LA LUCHA ELECTORAL
20. El Partido Popular Socialista de México sustenta que en la lucha revolucionaria lo más permanente son los principios, en segundo término en cuanto a durabilidad, está la estrategia, y en tercer lugar, la táctica. Ésta puede cambiar con cierta facilidad si así lo demandan las circunstancias; la estrategia no tanto, se le debe tratar con mayor cuidado; pero los principios muy difícilmente se pueden modificar, puesto que se vinculan a grandes períodos históricos. En este marco, en cuanto a la propuesta mayoritaria de priorizar la combinación de la lucha electoral, la batalla parlamentaria y el movimiento de masas, no la objetamos, siempre y cuando cuidemos que esta cuestión táctica no choque con nuestros principios ni nuestro objetivo estratégico ya dicho, sino que lo impulse. De ahí que debamos acordar ciertas reglas de manera consensuada.
21. Retomando lo planteado en el numeral 14: ante la imposibilidad de contar con un partido electoral que se identifique plenamente con los ideales y el programa del MLN y del bloque popular, que desde nuestro punto de vista sería lo más conveniente para nuestra participación en este tipo de actividad, ponemos a la consideración de las organizaciones hermanas la opinión de que la opción “a” está por encima de la “b”, es decir, es mejor participar a través de uno o varios partidos con registro, que sin registro; eso sí, en tanto no se afecte el objetivo superior, estratégico de fortalecer la lucha hacia la liberación nacional.
22. Por lo que hace a la disyuntiva del numeral 15, por cuanto al aspecto de la unidad e identidad, ponemos a su consideración la opinión de que es preferible la opción “d” en el sentido de que el MLN y el frente de masas enfrenten el proceso electoral de 2012 con unidad y cohesión consensuada, por lo menos una parte significativa de dicho movimiento, creando ciertos acuerdos y reglas por consenso, sobre la opción “c”, de hacerlo sin cohesión ni identidad propia, actuando cada grupo y cada organización como lo crea adecuado. Advertimos, sin embargo, que tratar de arrastrar al colectivo a una posición en el frente electoral, sea la de participar en la elección o no hacerlo; sea la de ir con el partido “x” o con el “y”, sea la de apoyar al candidato “n” o al “m”, la que sea, ése es el peor error, el único que no podemos permitirnos, porque atenta contra el objetivo estratégico al generar conflictos internos y división en el sujeto colectivo en proceso de edificación. Por eso, todo el asunto debe ser discutido de la manera más razonada y fraternal, y debe quedar a salvo, en todo momento, el derecho, por parte de las organizaciones que hipotéticamente mantuvieran discrepancias, a ejercer su autonomía sin que eso amerite censura ni reclamo alguno.
23. Ahora, por lo que hace al numeral 16, ponemos a la consideración colectiva la opinión de que ganamos mucho más en el proceso de construcción del bloque popular si tomamos la opción “e” en el sentido de participar electoralmente dentro del marco jurídico-institucional, con un alto nivel de cohesión e identidad propia, desde fuera de los partidos y haciendo alianzas negociadas y, por lo mismo, más o menos condicionadas con el o los partidos que sea viable, como pudieran ser el PRD, PT y Convergencia, y/o con quien escogiéramos de los aspirantes a la presidencia. ¿Qué negociaríamos? Principalmente que asumieran un compromiso claro y público con nuestro programa, el que refleja los intereses y contiene las aspiraciones del MLN y el bloque popular. La opción “f”, en el sentido de formar una corriente interna en el PRD, como MLN en su conjunto, la vemos desventajosa porque nos mete en una dinámica que no es la nuestra, perderíamos independencia, libertad de acción y capacidad de negociación. Y crearíamos conflicto con las organizaciones y grupos del movimiento popular que nada quieren con ese partido y/o las que prefieren trabajar con otros.
24. Corresponde hacer una distinción y una salvedad. La distinción: en el párrafo anterior nos referimos al asunto de la lucha electoral hacia el 2012, no a otras. Pero también está el hecho de que ya, en la actualidad y de tiempo atrás, varios grupos y organizaciones del MLN y del movimiento popular a la vez forman filas en el PRD y a través de esa institución hacen gestoría social y participan en elecciones de carácter municipal, ganando concejales y a veces las presidencias; incluso, los hay que participan en las legislativas y llegan a ganar algún diputado local o hasta federal, todo lo cual no lo censuramos, lo vemos necesario y correcto, y lo apoyamos en la medida de nuestras posibilidades. La salvedad consiste en que respaldamos solidariamente la proposición que hizo el compañero Marcos Tello, de Ediciones del Poder Popular, sobre la corriente interna, sólo que dándole el sentido de que quienes ya están en el PRD y desean seguir allí, formen una corriente unitaria, ellos sí, y sea muy fraternal y operativa. Porque, si compañeros del MLN actúan en el seno del PRD sin reunirse entre ellos primero, sin construir acuerdos de manera previa y fraternal y al rato se andan peleando, eso atenta contra el fortalecimiento del MLN y del bloque popular; y a veces hasta nos traen sus conflictos aquí, metiéndonos en una dinámica que no nos corresponde. Por eso nuestra propuesta, a la consideración de todos ustedes, compañeros, es en el sentido de que acordemos que quienes ya forman parte del PRD o decidan incorporarse, y sean miembros del MLN, se organicen en una corriente interna unitaria y fraternal, en la que unifiquen sus posiciones en todo lo que concierne a sus actividades en ese partido. Igual medida procedería en el caso de que haya compañeros del MLN que se incorporen a otros partidos de tipo electoral.
25. En otro aspecto, sobre el tema electoral. El compañero Benito Mirón Lince planteó la idea de que convoquemos, como MLN y como Diálogo Nacional a los partidos a que debatan entre ellos en un gran foro, frente a nosotros, a que nos convenzan de la justeza de sus propuestas. Nos parece adecuado como mecanismo de presión para que entiendan que tenemos problemas y demandas con las que deben comprometerse, si quieren nuestro apoyo o una alianza con ellos. En el mismo sentido, creemos que debemos buscar una interacción con fines semejantes –no necesariamente igual en la forma- con los aspirantes a la presidencia, AMLO y Ebrard, pues todo indica que tendrán más peso y relevancia ellos, los aspirantes ya desde ahora y, a fin de cuentas, quien resulte abanderado, en la concreción de alianzas y compromisos hacia 2012, que los aparatos partidistas que generalmente acaban a la zaga. Ellos, candidatos y partidos con registro serían parte así del bloque opositor, junto con nosotros, en una alianza condicionada y negociada que haría más fuerte cualitativamente al bloque opositor, al hacer más fuerte a un componente nuclear, el bloque popular. Sin tener una propuesta sobre el mecanismo concreto, ponemos a la consideración de las organizaciones hermanas la idea de buscar en el corto el acercamiento y la interacción con esos dos personajes, en busca de compromisos programáticos antineoliberales y hacia la liberación nacional.
26. Desde luego que, con ese rumbo, una tarea inmediata del MLN sería la de consensuar entre nosotros las propuestas de carácter programático que plantearíamos en pos de una alianza, dándoles un orden de prelación, sobre cuáles estimamos fundamentales y no negociables, y en cuáles podemos ceder en busca de dicha alianza, porque éstas nunca operan con la lógica del todo o nada.
27. Antes de concluir, otros dos temas en los que queremos exponer nuestra opinión: a) Sobre el tema de la relación entre el MLN y el Diálogo Nacional, que es indispensable y urgente consensuar, en nuestro caso coincidimos con lo que expresó aquí el MONAE por voz del compañero Mirón Lince: “el MLN debe ser el hilo conductor y el organizador del Diálogo Nacional”, en consecuencia, ponemos a la consideración de las organizaciones hermanas lo siguiente: a) a la vista de que un grupo de organizaciones estamos en ambas instancias, debemos evitar que se dupliquen el debate y las funciones, de nada nos serviría alguno de los dos instrumentos si se nos confunden y se vuelven casi iguales; b) Para nosotros, el MLN debe ser el espacio de los consensos políticos, de la discusión fraternal y las decisiones colectivas sobre todo lo que tenga que ver con la integración, el rumbo, la estrategia y la táctica, con las grandes tareas del DN; c) Cuando entre nosotros surjan enfoques diferentes sobre cualquiera de esas cuestiones, debemos ventilarla aquí, establecer acuerdos e ir al Diálogo Nacional con enfoques comunes, consensuados; d) El Diálogo Nacional debe tener mayor amplitud numérica, que el MLN; en aquél deben participar muchas otras fuerzas diversas del frente social, ese debe ser su carácter; e) El MLN debe impulsar al Diálogo Nacional, fortalecerlo, como expresión más vinculada al bloque opositor que al bloque popular.
28. Por último, sobre el tema de la revocación de mandato a Calderón queremos expresar que el tema tiene varios enfoques positivos que requieren precisión y acuerdos: a) uno sería el de promover la necesidad de que se establezca en la Constitución y las leyes, el derecho del pueblo a revocar el mandato de todos los funcionarios de elección popular que no satisfagan al propio pueblo. Se trata de una demanda justa y la apoyamos, se trataría de concretar un procedimiento para que el MLN abandere y agite esa propuesta. Proponemos que se comisione a alguna organización o un grupo de compañeros para que formulen un proyecto de campaña al respecto; b) Otro sería el de denunciar en específico a Calderón, difundiendo y explicando las principales razones por las que a éste personaje se le debe revocar el mandato –que son muchas y muy válidas- sobre la base fundamental de que la soberanía radica originalmente en el pueblo, según lo establece el artículo 39 de la Constitución y, aunque no se haya legislado en concreto sobre la revocación de mandato, el pueblo tiene derecho a echarlo, si no le sirve y, como sucede en la realidad, gobierna en contra de los intereses de la mayoría popular. Proponemos que la misma comisión formule un proyecto para que el MLN emprenda esa campaña política de agitación y elevación de la conciencia popular al respecto. Como se ve, no se trata de dos cuestiones divorciadas del todo, tienen mucho en común. Y por último, esta comisión debe tener en cuenta que el MLN tiene entre sus fines el de tomar el gobierno e incluso todo el poder, por lo que nuestra denuncia de Calderón y nuestra demanda de echarlo no debe ser “light” ni prestarse a la falsa ilusión de que si se fuera se resolverían los problemas de fondo. Eso puede entenderse que lo plantee alguna corriente de la pequeña burguesía resentida, incluso AMLO, desde su óptica clasista y personal, pero no el MLN que tiene que hacer planteamientos de clase, muy claros y definidos.

Ciudad de México, a 18 de agosto de 2009.

Por la Dirección Política del Partido Popular Socialista de México,
Cuauhtémoc Amezcua Dromundo,
José Santos Cervantes,
Juan Campos Vega,
Luis Miranda Reséndiz.

agosto 03, 2009

Documento del Movimiento Nacional "Aquí Estamos" para los Debates del MLN

Discurso pronunciado por Benito Mirón Lince, en el 4to Aniversario del “MONAE – AQUÍ ESTAMOS”, el 6 de junio de 2009.

Amigas y amigos:
Señoras y señores invitados
Compañeras y compañeros todos


Primero que nada, quiero agradecer la presencia de todos ustedes en este evento, para nosotros muy importante, que marca el cuarto aniversario de nuestra organización “Aquí Estamos”.
De manera muy especial, un reconocimiento a todas y todos aquellos compañeros que vienen desde los diferentes Estados de la República, por el desgaste y esfuerzo que ello significa pero que a la vez nos llena de optimismo y coraje para continuar construyendo nuestros ideales y esperanzas en aras de no ceder en la necesaria necedad de intentar limpiar el camino sobre el cual hoy se conduce a la patria.
Sí, fue hace 4 años, aquí mismo, cuando dijimos “Aquí Estamos”; han pasado muchos días, unos meses y pocos años desde que un grupo de compañeros empezamos a recorrer la República para construir esta nueva organización; nueva como “Aquí Estamos”, pero con muchos años de lucha, experiencias, pesares y sufrimientos de quienes hoy la conforman.
Era un momento especial de nuestra historia reciente aquel junio de 2005, cuando junto con la mayoría de los mexicanos abrigamos la esperanza de caminar por un rumbo distinto al proyecto de los neoliberales, representados en la lucha electoral por el PRI y el PAN.
En ese momento justificamos nuestra existencia como organización empeñándonos en un trabajo a fondo para contribuir al triunfo electoral de nuestro candidato presidencial, hoy Presidente Legítimo de México, Andrés Manuel López Obrador. Teníamos que trabajar para ello y también para vigilar que después del triunfo el cambio se hiciera realidad; se hizo lo primero, y lo segundo quedó en el aire; debemos reconocer, todos, desde Andrés Manuel López Obrador, hasta el último participante en éstos hechos, que el pueblo cumplió, que éste pueblo no tiene el gobierno que se merece y que sin embargo no fuimos capaces de hacer valer ese triunfo; nuestro pueblo siempre ha cumplido a lo largo de la historia y en los tiempos recientes, cumplió en 1988, en 1994 y en el 2006, y sin embargo la derecha sigue gobernando. Hoy como ayer la tarea es prepararse para ganar, pero la gran tarea es prepararse para hacer efectivo ese triunfo, haciendo valer todas y cada una de las formas de lucha que el pueblo tenga a bien darse, sin dejar de reconocer que un momento importante lo marcan los procesos electorales, pero que deben ser acompañados por los grandes movimientos sociales como parteaguas históricos que señalen el camino por el que hay que transitar hacia lo nuevo, superando conducciones personalistas que siempre terminan privatizando los movimientos y sus aspiraciones, alejándolos de las decisiones colectivas que terminan por marginar a muchos y verdaderos dirigente populares.
Tenemos que preguntarnos ahora.- ¿Que ha pasado en estos 4 años? y la respuesta la encontramos pronto; un avance acelerado del modelo neoliberal y una notoria y preocupante falta de coordinación y trabajo conjunto sobre un mismo objetivo, de las fuerzas progresistas; separación no solo de la izquierda electoral con la social, sino de ellas entre sí; la derecha tiene capacidad y visión para andar junta, la izquierda hasta ahora no.
Más allá de quienes argumentan que el modelo neoliberal se derrumba y que ya mostró su incapacidad con la actual crisis económica mundial y en México, nosotros estamos convencidos que ningún modelo cae por sí mismo, si no se es capaz, no sólo de construir la nueva alternativa, sino de convencer al pueblo de su necesidad y viabilidad; esa es la tarea que también hoy se tiene.
Sí, creemos que el modelo neoliberal ha fracasado en México, pero no para los de mero arriba; ha fracasado para los más, para los todos; para muestra unos cuantos datos:
194,695 personas, que significa el 0.18% de la población del país, detentan recursos en el mercado accionario por 3 billones 827,748 millones de pesos, lo que representa el 31.5% del PIB Nacional (CNBV); un reducido grupo de mexicanos tiene en el extranjero 322,224 millones de dólares, cantidad 277% superior a las reservas de divisas, que son depósitos bancarios, acciones y propiedades principalmente. Crisis? Para quien? de 2001 a 2008, salieron 43,413.8 mdd.; esta cantidad duplica el programa de inversiones de PEMEX para 2009 que es de 19mmdd. (Banco de México); solo en el primer trimestre de este año, empresarios sacaron del país 5 mil 638 mdd. Y sigue; el Banco de México en el mes de abril anuncia que pondría a disposición de la banca comercial y de desarrollo 4 mmdd.; para que sean ofrecidos a las empresas que requieran divisas para cubrir sus pasivos de corto plazo en moneda extranjera; estos 4mmdd., equivalen a una tercera parte de los vencimientos de deuda externa privada de este año que son de 12 mmdd.
Para seguir con la danza de los millones, tenemos que decir que el espurio Calderón, elevó la deuda pública casi en un billón de pesos en 2 años, y en 8 años de panismo la deuda externa se incrementó en 308 mil millones de pesos. Lo del espurio equivale a 12 veces el endeudamiento de Zedillo en sus primeros 2 años. Al final del 2008, la deuda pública total es de 4 billones 333 mil 123.5 millones de pesos, lo que implica un aumento de 28.7% en 24 meses. Ahora cada uno de los 107 millones de mexicanos debemos $40,289 en lugar de los $32,044 al inicio del actual sexenio. (SHCP)
No, no es desde luego necesario preguntarnos a favor de quienes opera esta devastadora política económica neoliberal, cuando sabemos que en lo que va de las dos administraciones panistas, la desocupación ha aumentado en un 150%; más de 951,000 trabajadores quedaron cesantes solo entre junio de 2008 y marzo de 2009. La población ocupada pasó de 43.9 millones en junio-08 a 42.9 en marzo-09. (INEGI), y para tener claro la realidad de la criminal distribución de la riqueza, en contraste con los de arriba, 9 millones de trabajadores ganan hasta un salario mínimo; 18 millones hasta 2; 28 millones hasta 3 salarios mínimos y únicamente 5 millones de ellos perciben más de 5. Además de ello, entre otras injusticias tenemos la desenfrenada alza en los precios de los alimentos; los granos básicos subieron 63% en el último año, los de hortalizas entre 66 y 157%; los productos pecuarios entre 23 y 37% y más y más y más. Pero eso si, los bancos crecieron a niveles históricos de 38% (ABM) y cobran hasta 113.4% anual a tarjetas de crédito (CONDUSEF) duplicando las tasas de interés. Pero no olvidemos que también en 7 meses del 2008, se perdieron 30 mmdp en las Afores dinero de los trabajadores y las administradoras en cambio, ganaron 8 mil 834 millones en comisiones; las pérdidas fueron por inversiones en bolsa y tendrán un efecto directo en el monto de la pensión al momento de la jubilación. Contra eso es contra lo que tenemos que luchar; contra eso hay que organizarnos, unirnos, coordinarnos, todos, todos los que realmente queremos un cambio, dejando a un lado envidias, desviaciones y mezquindades, pero para ello es necesario también reconocer nuestras debilidades no para descalificarnos, sino para corregirnos, hacernos fuertes y poder cumplir con el papel que a cada uno como individuo y como organización nos toque jugar.
Hoy que tenemos para luchar por el cambio?. Todas las condiciones objetivas que se reflejan cada día más en una criminal desigualdad e injusticia social, así como una desmedida concentración de riqueza, supeditando el bienestar de la gente en beneficio del dinero, del lucro, del despilfarro y del gozo de unos cuantos. Por otro lado, en cuanto a las condiciones subjetivas que nos permitan construir el sujeto social capaz de impulsar la transformación que el país requiere, considero que las herramientas no son tan claras; tenemos una izquierda electoral (que habría que preguntarse primero si es izquierda) dividida, indecisa, que privilegia la lucha por los espacios, por los pequeños feudos y más interesada en jugar dentro de las reglas del sistema con el fin principal de conservar sus canonjías e intereses grupales por sobre el relacionamiento y apertura de espacios para su integración con el movimiento social y la lucha por la construcción de una nueva opción para éste México, que no merece lo que hoy está padeciendo; una izquierda electoral que no alcanza, porque tal vez no sea ese su propósito, a distinguirse de manera clara del centro y ni siquiera de la derecha, que termina por dejar al pueblo sin una visión clara de que se trata de votar por proyectos distintos para la Nación, pero además despistada, institucional, que no sabe moverse más que dentro del marco del orden establecido y sin aspiraciones de transformación del sistema y mucho menos revolucionaria, autista, sin reparar, en que el marco institucional, no da para una transformación profunda, revolucionaria, que es lo que se requiere si hablamos de construir un nuevo proyecto de Nación. Pretender lo contrario, es como jugar en cancha ajena, jugar de visitante y querer el apoyo del público. Se tiene que entender cómo se construyen las verdaderas transformaciones de la patria y tener siempre presente 1810-1858-67-1910 y los nombres de los hombres, que ahí y en esas y otras fechas y lugares estuvieron, para ser una generación de mexicanos, seria, luchadora y congruente y no un remedo o caricatura que no merezca ni siquiera un párrafo en un viejo y maltratado libro mal escrito de nuestra historia.
Tenemos también un movimiento urbano, social, campesino y sindical, anémico, anoréxico, que arrastra igualmente algunos de los males que antes mencionamos, un movimiento que quiere pero no puede, que no logra los niveles de claridad y organización que la lucha requiere, a veces por incapacidad, a veces por intereses; débil, sectorizado y que no logra superar los márgenes de la lucha reivindicativa que consume prácticamente todos sus esfuerzos y acostumbrado a permanentes derrotas y mesas de negociación, con mínimos márgenes de beneficio pero con máximos beneficios para la continuidad del modelo económico que queremos combatir.
Es importante dejar claro que lo antes mencionado no es obstáculo para reconocer los importantes y grandes esfuerzos de destacados dirigentes (algunos aquí presentes) y movimientos, por darle una auténtica conducción al esfuerzo por la transformación de la patria, pero en general, no se aterriza en una verdadera coordinación y línea de acción hacia un objetivo común; hasta hoy, el discurso no empata con la realidad, hay que apretar el paso, partiendo de lo que somos, de lo que tenemos, pero con todo el esfuerzo para superarnos y fortalecernos, para eso, para contribuir a ello, “Aquí Estamos”.
En razón de todo lo anterior, consideramos, que como organización, tenemos dos tareas fundamentales que hacer: Una interna y otra hacia afuera, con las organizaciones fraternas y con nuestros aliados. En el primer caso tenemos que ser autocríticos y reflexionar de manera profunda sobre lo que no hemos hecho; estoy convencido que todos podemos dar más, que es necesario trabajar mucho más por fortalecer nuestras instancias regionales, para darle un mayor peso a nivel nacional a nuestra organización; que es muy importante trabajar por la descentralización en la toma de decisiones de la Dirección Nacional, en base al trabajo y fortalecimiento de las instancias estatales, y que nuestros dirigentes de las entidades federativas, procuren enlazar sus luchas entre sí y relacionarlas con lo nacional también; el sostenimiento de un equipo por parte de la Dirección Nacional, que procure de manera permanente mantenerse en contacto con todos los compañeros de los estados y sostener una comunicación oportuna y eficaz que nos permita manejar una línea y un esfuerzo común; tanto nuestros compañeros y compañeras de la Dirección Nacional como de las regionales, debemos aplicarnos mejor en los asuntos del “Aquí Estamos” desde cada lugar donde exista nuestra organización; ver los éxitos y fracasos de la organización como nuestros y los nuestros como de la organización, en conclusión, cerrar filas y sentirnos todos uno mismo.
Hacia afuera tenemos que mostrarnos fuertes, ser fuertes, fraternos y decididos a unirnos al esfuerzo de los demás, de los que buscan los mismos objetivos que nosotros; tenemos que respetar las formas de lucha que cada movimiento elija y no solo ello, sino contribuir a su fortalecimiento mediante el esfuerzo que hagamos en el espacio que a cada uno de nosotros nos toque desempeñar.
Es un hecho, que el país se descompone cada vez más, con el modelo económico y el gobierno que hoy padecemos; que el pueblo de México está acumulando una enorme energía que pronto puede aflorar de muy diversas formas y que llegado el momento requerirá una adecuada conducción que evite el caos y sobre todo que pueda resultar inútil; por ello la necesidad de la unidad, la organización y la coordinación entre las fuerzas progresistas del país.
Los próximos 4 años, pueden marcar una etapa decisiva en el destino de la patria; o las fuerzas de la izquierda cambian el rumbo hacia un nuevo horizonte o la derecha contra viento y marea, a sangre y fuego, consolida su proyecto y México se reafirma como el gran lunar en Latinoamérica y cabeza de los intereses imperialistas, contrariando el gran esfuerzo transformador que hoy invade Latinoamérica.
El “Aquí Estamos” debe trabajar arduamente para, con modestia, con humildad pero con mucha decisión, coraje y en la medida de nuestras posibilidades, contribuir a fortalecer todas las formas de lucha y a todos los movimientos y dirigentes que se esfuerzan por los mismos objetivos, sin pretensiones de protagonismos o disputas por causas menores. Tenemos que estar en y apoyar la lucha electoral, impulsando a los mejores cuadros, sean de la organización que sean y a la vez vigilar junto con todos, el cumplimiento de los principios que le den justificación a esta forma de lucha. Quiérase o no, la coyuntura electoral se ha convertido en un momento importante de movilización del pueblo y el 2012 puede ser otra oportunidad para el avance de la izquierda, si somos capaces de contribuir, no solo al triunfo en las urnas, sino de construir el sujeto social que sea capaz de estar por encima de posiciones personales y de hacer valer el triunfo; estamos en la obligación de ganar, pero también de saber defender e imponer lo ganado. En este escenario, consideramos que cada quien tiene un papel que desempeñar y es fundamental el que le toca al movimiento social, obrero y campesino, que debe ser la base, para impulsar también esas otras acciones que en países como Bolivia, Venezuela, Ecuador, el Salvador, por citar solo algunos, han demostrado no solo su efectividad, sino que el esfuerzo electoral, no tiene futuro si no logra enlazarse y hacer partícipes a estos movimientos. Ahí la importancia estratégica de unir todas las formas de lucha y nuestra convicción de que la movilización de las mayorías, no solo en las urnas sino también en las brechas, los caminos y las calles, haría innecesaria la violencia revolucionaria, e inútil e inviable la perversa y criminal violencia del estado.
Por esas razones y otras más, es que “Aquí Estamos”, seguirá haciendo el llamado a todas las fuerzas, organizaciones y personas progresistas del país, como integrante del Diálogo Nacional y del Movimiento de Liberación Nacional, a impulsar la gran movilización de la toma de la ciudad de México el próximo 4 de diciembre, así como a instalar una mesa nacional, que tenga como primer objetivo, reunirse a discutir juntos el quehacer colectivo en estos tiempos de relevancia para la patria; espacio que permita, además de impulsar los liderazgos actuales de manera conjunta y coordinada, sentar la bases para la construcción de ese liderazgo colectivo que tanta falta nos hace

No me gaste las palabras
Ni cambie el significado
Mire que lo que quiero
Lo tengo bastante claro

Ya no somos inocentes
Ni en la mala ni en la buena
Cada cual en su faena
Porque en esto no hay suplentes

julio 31, 2009

Las posiciones del PCM-ML y del FSSP (Zac.) en la segunda jornada de análisis y debate interno del MLN

El martes 21 de julio, en la segunda jornada de análisis y debate interno del Movimiento de Liberación Nacional, plantearon sus ideas los compañeros del Partido Comunista de México, Marxista Leninista, y del Frente Popular por la Soberanía Popular de Zacatecas.

Los compañeros de la Vocería del PCM-ML consideraron que se requiere una nueva revolución en México, y que tiene que ser socialista, pues así lo determina la contradicción entre el desarrollo de las fuerzas productivas y las relaciones de producción. También, que la única forma de destruir al Estado burgués es a través de la violencia revolucionaria de las masas: la lucha armada del pueblo, por medio de la insurrección general de obreros y campesinos pobres, la instauración de la Dictadura del Proletariado y la construcción del socialismo y el comunismo científicos. Sin embargo, la insurrección armada de masas no es una herramienta de coyuntura, sino una etapa culminante de la lucha revolucionaria, y en el camino hacia esa culminación, no se trata de escoger, por ejemplo, entre la lucha electoral y parlamentaria, la movilización de masas, o la huelga política general, sino que todos ellos son peldaños que pueden y deben ser utilizados para acercar el momento de la insurrección armada revolucionaria de las masas.
Lo fundamental en el periodo actual, estima el PCM-ML, es consolidar el complejo proceso de Frente Único que ya despunta en el país, y esto sólo se puede lograr ampliando las miras y la perspectiva del movimiento de masas en su conjunto, desarrollando a cabalidad las tareas y acuerdos como organizaciones y como militantes del amplio proceso unitario, que nos damos, desde el Diálogo Nacional y las tareas emanadas en su 7ª edición, el Movimiento de Liberación Nacional, los procesos locales de frente único como la APPO, la APPMich, y otras, hacia las movilizaciones del 1º de septiembre y el 4 de diciembre.
Por lo dicho, el reto hoy es articular de manera dialéctica la lucha parlamentaria y electoral en todos sus niveles, la movilización de las masas populares y la violencia revolucionaria en la pelea de masas, en los procesos insurreccionales, hacia la toma del Poder y en el ejercicio del Gobierno. La salida democrático popular a la actual situación de crisis, a su juicio, implica la caída del actual gobierno y la supresión de las actuales instituciones republicanas, el establecimiento de un Gobierno Provisional Revolucionario, con el nombre que se quiera y pueda poner: “junta de salvación nacional”, “frente patriótico”, etc., pero que se sostenga desde las calles, con la fuerza de las masas, con cuyo respaldo, el Gobierno Provisional Revolucionario, convoque a una Asamblea Nacional Constituyente Democrática, Proletaria y Popular, que discuta redacte una nueva Constitución, emanada de las necesidades de las amplias masas insurrectas.
El método de lucha que decidamos emplear, combinar o complementar, legal o ilegal, violento o pacifico debe tener un sustento de masas movilizadas, una dirección colectiva y una capacidad orgánica probada en la confrontación y la política de clase. La fuerza material que logremos desplegar será el fiel de la balanza. Lo inmediato es concentrarnos en la organización consciente de la fuerza material para la revolución proletaria y la dictadura del proletariado. Para esto requerimos del Frente Único de todos los explotados y oprimidos en contra del capital y los fascistas, golpear a la oligarquía financiera para despojar a toda la burguesía.
La exposición de los compañeros del PCM-ML suscitó un vivo y por momentos acalorado debate, que fue de gran utilidad para precisar conceptos, en el camino hacia la construcción de la concepción colectiva del MLN, respecto de la agenda de mediano plazo.

En su turno, los compañeros del FSSP, representados por el compañero José Santos Cervantes, de la Coordinación General de ese colectivo, transmitieron sus experiencias en la construcción y funcionamiento de un frente que es sumamente amplio, plural y altamente unitario, además de que ha librado numerosas batallas en defensa de los intereses populares en la entidad, muchas de ellas, victoriosas.
Su exposición, sustentada en los documentos fundamentales del FSSP, destacó el ascenso revolucionario que se da hoy en América Latina, cuyo instrumento ha sido sobre todo la movilización popular fuera de lo tradicional, al margen de los partidos políticos electoreros y en lucha contra las clases dominantes. Movimientos que rebasan las demandas puramente economicistas y que aspiran a llevar hasta las últimas consecuencias la revolución por la segunda y definitiva independencia de sus pueblos, modalidad que, estiman, es del todo válida para México.
Pusieron énfasis en el tema de los objetivos de la lucha, que deben ser no sólo en defensa de los intereses inmediatos y concretos de las organizaciones populares y obreras, sino que deben destacar la lucha política por la toma del poder, que se le debe arrebatar a la burguesía imperialista que ahora lo detenta. Consideraron que la lucha debe ser unitaria, de la clase trabajadora en su concepción amplia y de todos los sectores populares agraviados por el imperialismo. Plantearon que todas las formas de lucha son válidas, y que a su juicio no ha llegado el momento en el que ya resulte urgente precisar una concreta, como prioritaria, porque por ahora lo más importantes sigue siendo la acumulación de fuerza, en cantidad y calidad, o sea la construcción de un gran frente político y social único.
Declararon que el actual sistema de partidos es nefasto y que, a su juicio, ninguno de los partidos que participan en los procesos electorales ofrece posibilidad alguna para la defensa de los intereses populares, sino que se trata de instrumentos de carácter puramente oportunista.
Destacaron como parte de lo más valioso de sus experiencias, el hecho de que en su seno se expresa la más amplia fraternidad en el trato; el pleno respeto a la autonomía de cada organización; la discusión colectiva de los problemas, de las ideas y de las actividades, y un elevado nivel de responsabilidad en el cumplimiento de las responsabilidades que cada quien asume.
La exposición de los compañeros del FSSP dio pie a preguntas, comentarios y reflexiones de los demás asistentes a la sesión de trabajo, que de nueva cuenta resultó exitosa.

El debate interno del MLN apunta hacia el pleno alcance de los ambiciosos objetivos que le planteó su pasado Consejo Nacional.

julio 22, 2009

Documento aportado por el Frente Social por la Soberanía Popular de Zacatecas

ESCENARIO INTERNACIONAL
En el siglo pasado a raíz de diversos acontecimientos, entre ellos, a la irrupción de la revolución científico-técnica, en los años setenta y a finales del siglo con la desaparición del campo socialista, los Estados Unidos emergieron como la única y más poderosa potencia económica y militar que haya existido en la historia.
Este poderío imperial le permitió a través de diversos mecanismos imponer un comercio internacional todavía más desigual y desventajoso para los países pobres como el nuestro; un premeditado endeudamiento externo inmoral e injusto, con lo que las economías subdesarrolladas terminaron endeudadas y en crisis. Estados Unidos, entonces asumió el papel de salvavidas y utilizando sus instrumentos financieros como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM), comenzó a prestar para poder pagarle, a condición de que se establecieran medidas de política económica y social de carácter neoliberal. Es decir, eliminando cualquier restricción a la entrada de sus mercancías o a la inversión de sus capitales.
Esta modalidad adoptada por el capitalismo en el mundo en el último cuarto de siglo –la globalización neoliberal- no es un acto de creatividad ni una muestra de audacia, sino que constituye la forma que corresponde a un capitalismo senil en crisis, tiempo en que todas las contradicciones del sistema se agudizan y auguran su final cercano. Es una etapa en la que el imperialismo se exacerba, se torna más voraz e insaciable; más contaminante y destructor de la Naturaleza y de sus recursos, más devastador de la Vida en todas sus formas; más agresivo contra los Pueblos todos, del mundo, véanse los casos de Afganistán, Irak, Palestina, Líbano, y los amagos a Irán, Corea, Siria, Venezuela, Cuba… El imperialismo se vuelve amenazador para la Civilización, más que nunca, para los frutos de la Cultura Universal y de las Culturas particulares de los pueblos; más peligroso para la Humanidad toda.
Todas las contradicciones que ha generado el sistema capitalista mundial se dan en esta etapa de una manera más aguda que antes: la contradicción entre las potencias imperialistas y los pueblos que luchan por su liberación; la que se da entre el imperialismo y la clase trabajadora de los países imperialistas, y la interimperialista, entre sus distintos focos de poder, hoy sobre todo Estados Unidos y la Unión Europea, que se disputan el dominio del mundo. El imperialismo toma hoy el carácter de enemigo fundamental de la clase trabajadora y los pueblos del mundo, con mayor nitidez que nunca.
No obstante, las fuerzas más regresivas del imperialismo y sus lacayos, retoman rasgos de la época del fascismo en muchos lugares del planeta; ejercen el terrorismo de Estado; suprimen libertades y derechos democráticos, individuales y colectivos, fruto de largas luchas históricas; acentúan conductas de feroz anticomunismo; inhabilitan organizaciones de lucha, comunistas y progresistas; criminalizan las luchas y a los luchadores populares; califican de “terroristas” a los emancipadores y revolucionarios y a gobiernos de países que asumen posturas dignas y antiimperialistas; promueven la xenofobia y el racismo.
La lucha de clases tiende a agudizarse en el escenario del mundo cada vez más. Se incrementa y crece en su importancia la batalla de las ideas. Crece asimismo la movilización de los pueblos del mundo contra el neoliberalismo, en su calidad de expresión actual del imperialismo; también la lucha contra las guerras que desatan el imperialismo y el sionismo, y la lucha en defensa de las libertades y los derechos individuales y sociales.

AMÉRICA LATINA
En América Latina, es particularmente notable la tendencia ascendente de la lucha por la Segunda y Definitiva Independencia de nuestros pueblos, en nuestros días.
Históricamente el imperialismo norteamericano ha visto a América Latina y el Caribe como zona de exclusivo dominio. Sin embargo, hace cinco lustros, como parte de la globalización neoliberal, lanzó una nueva ofensiva para acrecentar su hegemonía. Lo hizo con el fin de fortalecer su posición en la lucha interimperialista en la arena mundial; también persiguió por ese medio nutrir su economía en crisis, a costa de la sobreexplotación y el saqueo de las nuestras; quiso asegurarse el abasto de energéticos –petróleo, gas, uranio-, y fortalecer su política belicista.
En nuestros días, sin embargo, la clase obrera y sus aliados en la lucha contra el imperialismo en América Latina y el Caribe experimentan una importante fase de ascenso. Luego del triunfo y la consolidación de la Revolución Cubana, la que más ha logrado avanzar hacia su independencia es la Revolución Bolivariana de Venezuela, que está viva y vigente. Es un proceso que se ha ido radicalizando a un ritmo vertiginoso, acentuando cada vez más su carácter antimperialista, y que hoy en día ya explora el camino hacia su reorientación al socialismo y empieza a dar pasos concretos en esa vía.
El proceso revolucionario en Bolivia, tercero en orden cronológico, de los procesos revolucionarios profundos que están en marcha en América Latina, ha avanzado vigorosamente desde el ascenso a la Presidencia, de Evo Morales. Este país andino ahora integra, junto con Venezuela, un dúo de naciones opuestas al imperialismo con firmeza y dispuestas a enfrentar sus designios sin concesiones.
Además de los procesos revolucionarios antiimperialistas profundos ya señalados, hay otros cambios de menor profundidad pero importantes, en América Latina, como los que se dan en Brasil, Argentina, Uruguay y Nicaragua, y el muy reciente en Ecuador. Gobiernos como el de Lula, Kirtchner, Tabaré y casi seguro el de Daniel Ortega, actúan en una lógica distinta de los de Venezuela y Bolivia, y desde luego, del de Cuba, porque su naturaleza es distinta y sus condiciones también lo son. Es verdad que no se enfrentan al imperialismo en su esencia, en su base económica; no nacionalizan sus recursos y, en muchos casos, ni siquiera frenan la penetración creciente del capital extranjero, sino que la toleran. Más todavía, algunos de ellos tampoco defienden, o no lo hacen con la firmeza necesaria, los derechos de los trabajadores y las masas populares frente al Poder económico imperialista, sino que continúan aplicando las políticas neoliberales. Sin embargo, no son lo mismo que otros gobiernos, como el de Uribe, en Colombia, ni los del PAN en México. Son gobiernos que tienen una política exterior independiente, que por lo menos en ese ámbito no se pliegan a los dictados de Washington y que interactúan de manera muy positiva con otros países del mundo al margen y aun en contra de los intereses yanquis, sea China, propiciando la diversificación de sus mercados; sean India y Sudáfrica, promoviendo un bloque que enfrente a Estados Unidos y la Unión Europea en la OMC, o sea Venezuela Bolivariana, propiciando su integración en el MERCOSUR y dando paso a una interacción económica con alto significado político de independencia frente al poderoso. Pero, sobre todo, lo que tiene mayor importancia y un sentido muy positivo de la política internacional de estos gobiernos, es su posición amistosa con respecto a Cuba, su negativa a sumarse al bloqueo criminal y su tendencia a exigir el cese del mismo en los foros internacionales. Todo esto tiene repercusiones significativas tanto en el escenario latinoamericano como en la arena mundial.
Debemos destacar que en el ascenso revolucionario de nuestros días en América Latina ha habido un instrumento cuyo uso se ha generalizado: la movilización popular, fuera de los cánones tradicionales, independientes de los partidos políticos electoreros tradicionales, del gobierno y de las clases dominantes. Movimientos que rebasan las demandas puramente economicistas, sino que se han planteado llevar hasta las últimas consecuencias la revolución por la segunda y definitiva independencia de sus pueblos.

ESCENARIO NACIONAL
Así desde hace más de dos décadas y en casi todo el mundo se impuso la propaganda neoliberal y con la complicidad de los gobiernos como los que hemos padecido en México desde 1982, se dio marcha atrás a los avances alcanzados, hasta entonces.
En nuestra nación en materia de desarrollo económico y social, se han ido revirtiendo. Ahora nuestro país es más dependiente y menos soberano que hace 25 años. Se han privatizado las empresas más grandes y rentables: Teléfonos de México, los bancos, los ferrocarriles, las empresas mineras, forestales y pesqueras, la siderurgia, las fábricas de automóviles y carros de ferrocarril que estaban en manos del Estado. También se han rematado los puertos y aeropuertos, la comunicación satelital, y la petroquímica, las aseguradoras, el servicio de aduanas y últimamente el régimen de pensiones y jubilaciones del ISSSTE. También se privatizó la tierra y se eliminaron todos los subsidios que antes se les otorgaban a los campesinos pobres y se firmó en 1994 el Tratado de Libre Comercio de América del Norte con los Estados Unidos y Canadá, con lo que el destino nacional quedó uncido a los intereses imperiales.
Pero esto no les basta, ahora el FMI y el BM, exigen la entrega total de PEMEX y de la industria eléctrica, lo que los gobiernos neoliberales llaman “reformas estructurales”.
A los trabajadores mexicanos también se nos ha obligado a dar marcha atrás a nuestras conquistas. Los salarios han perdido más del 75 % de su poder adquisitivo en los últimos 24 años, la Ley Federal del Trabajo se viola sistemática e impunemente, teniendo como ejemplo de esto, el despido de miles de trabajadores en empresas públicas y privadas, la eliminación de miles de plazas por parte del gobierno federal supliéndolas por contratos temporales, se mutilan contratos colectivos, incluso por la fuerza. Los empleos y plazas de nueva creación se establecen en condiciones precarias y sin prestaciones ni reconocimiento de derechos laborales. Los fondos de pensiones se han privatizado a través de las llamadas afores. Los precios del gas doméstico, de las gasolinas, de la electricidad que han venido aumentando mensualmente, sufrirán otro más a partir de enero de 2008, y los precios de otros productos de primera necesidad también siguen aumentando, así como el transporte y otros servicios básicos.
Pero tampoco esto les basta al FMI, al BM y al gobierno federal, pues pretenden eliminar totalmente el sistema de pensiones, y la seguridad social, representada por instituciones beneméritas como el IMSS y el ISSSTE. También quieren agregar el IVA a alimentos y medicinas, y como si esto fuera poco también pretenden legalizar las violaciones a la Ley Federal del Trabajo, reformándola porque el gobierno y los patrones consideran que esa ley nos otorga muchos privilegios y que deben ser eliminados, para que los patrones puedan contratar trabajadores de acuerdo a sus condiciones y despedirlos cuando se les dé la gana, todo esto también como parte de las llamadas “reformas estructurales”.
Y para colmo de todo esto, el gobierno federal en su afán de defender los intereses patronales, está aplicando una política torpe de intromisión e injerencia en la vida interna de las organizaciones sindicales, promoviendo la división y desarticulación, a través de grupos mercenarios o sicarios del sindicalismo, que queriendo cobijarse con la bandera de la democracia sólo han logrado el debilitamiento de sindicatos otrora fuertes, vulnerando y menoscabando el magno de los derechos constitucionales contractuales como es el de coaligarnos, como está sucediendo en el gremio minero.
El saldo de estos 5 lustros de política neoliberal es sumamente negativo para la nación, para la clase trabajadora y el pueblo mexicano en su conjunto, y no hay perspectiva de que en lo inmediato mejore nuestra situación porque la aplicación del proyecto neoliberal en materia económica y social, también tiene su vertiente política. Las distintas reformas electorales llevadas a cabo en más veinte años de neoliberalismo, se realizaron bajo la batuta de la oligarquía nacional y extranjera con el objetivo de establecer un sistema de partidos que garantizara la permanencia del proyecto neoliberal sin importar que los partidos se alternaran en el poder, como ya sucedió en el año 2000 y en el 2006. Porque sin el actual sistema de partidos sería imposible el funcionamiento de la democracia burguesa, y la clase dominante se vería en la necesidad de apoyarse abiertamente en los órganos de violencia: ejército, cárceles, policía, imponer estados de sitio, etc. para poder aplicar su proyecto.
Por eso, toda oposición eficaz al neoliberalismo ha sido borrada del escenario electoral. Las campañas electorales son costosas y sin contenido programático, el financiamiento privado ha dejado fuera de la competencia –en la práctica- a los representantes de la clase trabajadora y ha permitido la intromisión de recursos ilícitos provenientes del narcotráfico y del extranjero. Este sistema de partidos al servicio de una sola clase social, la burguesía, ha generado el mayor de los oportunismos. La eliminación de la lucha ideológica en el ámbito electoral, y su sustitución por la mercadotecnia, permite a los individuos cambiar de partido sin ninguna dificultad y sin ningún rubor. Todo esto no favorece a la clase trabajadora y la condena a seguir padeciendo las nefastas políticas neoliberales.
Con el escandaloso fraude del 2 de julio de 2006 se puso a vista de todos, el alto nivel de descomposición que existe en el aparato político de las clases dominantes de nuestro país. Se cierne sobre la república la sombra fascista de un presidente impuesto por la vía del fraude desde las altas esferas del poder y del capital.

ESCENARIO LOCAL
A todos estos problemas nacionales hay que agregar la ineficacia y las torpezas de los gobiernos estatales que en su soberbia no se diferencian del gobierno federal, tampoco hay mucha diferencia si provienen de uno o de otro partido.
Por el contrario los problemas se agravan para los trabajadores dependiendo del grado de desarrollo económico de cada entidad. Es el caso de Zacatecas en que la producción más importante es la que se da en el sector primario: agropecuario en su mayor parte atrasado y rudimentario; y, minero éste último fundamentalmente en manos de grupos oligárquicos nacionales o transnacionales y con un incipiente desarrollo industrial. La empresa industrial más grande e importante como la cervecera, propiedad de grandes capitalistas privados nacionales y extranjeros no reinvierte sus ganancias, explota la mano de obra barata, pisoteando sus derechos laborales, y la riqueza hidráulica, dejando ínfimos beneficios al desarrollo de nuestro estado. Este escaso desarrollo de las fuerzas productivas y la descapitalización ancestral, son la causa de la expulsión permanente y cada vez mayor de mano de obra a Estados Unidos y a otras entidades.
Nuestro estado forma parte de las entidades del país con mayor atraso en su desarrollo social. Oficialmente se ha reconocido que 30 mil familias zacatecanas sobreviven con un ingreso total de 1,300 pesos mensuales –unos 40 pesos diarios-, y también, que han emigrado principalmente a Estados Unidos cerca de millón y medio de zacatecanos lo que equivale a la mitad de la población nacida en nuestro estado, para buscar el sustento personal o familiar que aquí no encuentran.
La emigración ya se da como un fenómeno normal en la ciudad y el campo, entre personas con preparación y sin preparación académica. No obstante todas las secuelas negativas en lo familiar y social que esto conlleva y que en nada compensan las remesas, por muy significativas que sean.
En lo político, a pesar de que desde hace nueve años, se dio el cambio de partido en el gobierno del estado, esto no se ha reflejado en un algún beneficio sustancial para el pueblo y la clase trabajadora, tampoco ha cambiado ni un ápice la estructura económica de la entidad, el cambio más importante es el que se ha dado en las condiciones de vida de los nuevos gobernantes, estos sí la han mejorado notablemente.

EL PRINCIPIO DE LA LUCHA DE CLASES
En un país como el nuestro en el que después del proceso constructivo de la Revolución Mexicana, a partir de 1982 se pasó a una etapa de plena sumisión y entrega de los intereses nacionales a la potencia imperialista más grande de la historia, la lucha social tiene dos formas bien definidas: la lucha de la clase trabajadora contra la clase capitalista, y la lucha de la nación contra la intervención en su vida interior de los monopolios norteamericanos. Esta doble lucha no encierra contradicción ninguna ni se libra exclusivamente en el seno de México. Es característica de todos los países que se hallan en el mismo periodo de evolución económica y política que el nuestro.
La lucha entre la clase trabajadora y la clase capitalista, es decir, la lucha de clases, presenta múltiples e interesantes aspectos, asimismo, la lucha de la nación contra el imperialismo tiene diversas e importantes características que por causas históricas y geográficas especiales algunas de ellas son propias de México.
Sostenemos entonces que si la clase trabajadora quiere resolver sus problemas de raíz, debe luchar por la independencia nacional, y esta lucha es de mayor importancia que la que se da por demandas puramente económicas, porque mientras sigamos sometidos al saqueo y la explotación y por tanto al dominio del capital extranjero, no hay posibilidades ni de establecer un régimen verdaderamente democrático ni de que nuestro pueblo y la clase trabajadora pueda tener acceso pleno a los bienes de la civilización y la cultura.
¿Cuáles son las tareas de la clase trabajadora zacatecana en esta etapa? una, quizás la más importante es la de ir organizando y construyendo su unidad, y la otra no menos importante es la de crear su programa de lucha, con objetivos nacionales y estatales, y la otra tarea es la de ponerse en sintonía con el movimiento social que se está movilizando en el resto del país.
Sin embargo la unidad de la clase trabajadora, no debe ser un fin en sí mismo, sino que debe darse sobre la base de principios y objetivos de clase. Es decir, reconocer el principio de la lucha de clases. Entonces, debe ser una unidad consciente, combativa, que reconozca las diferencias, en las formas de lucha de las organizaciones y en su grado de desarrollo. Una unidad en que se respeten las distintas concepciones políticas, filosóficas, religiosas, etc.
Esta organización y unidad de la clase trabajadora debe darse independientemente del gobierno, de los partidos políticos y de la clase dominante, de otra manera sólo estaría formando parte del actual sistema y en lugar de cambiarlo, ayudaría a perpetuarlo.
Esta unidad de la clase trabajadora también debe darse sobre la base de la práctica de la más elevada democracia, es decir, donde su forma de organización y funcionamiento se dé tomando en cuenta la opinión de todas las organizaciones e individuos. Que el análisis y discusión se dé sobre la base del trato fraternal y la participación de todas las organizaciones en la toma de decisiones. Que una vez tomados los acuerdos la minoría se supedite a la mayoría, etc.
Si esta organización de la clase trabajadora se da sobre la base de la unidad, la independencia y la democracia, partiendo del reconocimiento de la existencia de la lucha de clases, entonces la lucha debe darse en tres niveles: económico, político e ideológico. La lucha económica es de primordial importancia porque de ella depende la subsistencia del trabajador y su principal arma es la huelga. Pero si la lucha de la clase trabajadora se circunscribe sólo a las demandas de carácter económico, se enfrenta sola y aislada a sus patrones y cae en el terreno del economicismo.
Por lo tanto, debe darse también en el terreno político, es decir, debe llevar la lucha de clases al seno del parlamento, de los ayuntamientos, etc. en la lucha política el enfrentamiento ya se da entre la clase trabajadora y la clase burguesa, para que su lucha sea exitosa debe enarbolar su propio programa que incluya los cambios necesarios en la sociedad en lo político, económico y social, para beneficio del pueblo y la clase trabajadora, Porque si los cambios se quedan sólo en el terreno político y se deja intacta la estructura económica, la burguesía y el imperialismo seguirán siendo los únicos beneficiarios, por lo tanto se debe trabajar para construir su instrumento político, mediante el cual deberá tomar el poder y desde ahí hacer los cambios revolucionarios o radicales.
La lucha no termina ahí. La clase trabajadora también debe darla en el terreno ideológico. Esta es la batalla de las ideas y es la lucha más importante, porque cuando las ideas emancipatorias de la clase trabajadora triunfan sobre las ideas de la burguesía, sólo entonces, podrá realizarse la revolución social. Para lograr esto la clase trabajadora debe tener su propia filosofía, una filosofía que no sólo le ayude a explicarse el universo, el mundo y la vida sino que le ayude a transformarlo.

LA LUCHA UNITARIA EN LOS FRENTES SOCIALES
Desde los primeros años del neoliberalismo (1982), se privatizaron cientos de empresas del Estado con el argumento de que estaba obeso y había que adelgazarlo, de esa manera muchas empresas fueron privatizadas y muchos trabajadores perdieron sus fuentes de trabajo, hubo luchas de resistencia pero casi todas fueron derrotadas, principalmente porque actuaron de manera aislada.
En 1999 se intentó modificar nuestra carta magna en sus artículos 27 y 28 para abrir a la inversión extranjera la industria energética para impedirlo; el Sindicato Mexicano de Electricistas convocó a la creación del Frente Nacional de Resistencia que logró, junto a varios movimientos aliados, que Ernesto Zedillo fracasara en sus propósitos de entregar al capital extranjero la industria eléctrica y la del petróleo.
Al calor de este frente fueron surgiendo otras grandes expresiones de la lucha de masas ampliamente unitaria contra el neoliberalismo, como el Frente Sindical Mexicano, y junto con la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) y una amplia gama de organizaciones dieron lugar al Frente Sindical, Campesino, Indígena, Social y Popular, la Promotora por la Unidad Nacional Contra el Neoliberalismo y otras mas; todas ellas, y otras expresiones frentistas confluyen en el referente que, por hoy, constituye por su amplitud, grado de consistencia, madurez y contenido programático la forma más acabada, el DIÁLOGO NACIONAL; en el que participan más de seiscientas organizaciones diversas, de obreros, campesinos, indígenas, estudiantes, mujeres, intelectuales, movimientos civiles y de género y otros, juntos acuerdan el Proyecto de Nación Alternativo al Neoliberalismo, un avanzado programa antiimperialista y de liberación nacional, construido por consenso, y que ha logrado movilizar de manera combativa a centenares de miles de compatriotas tanto en la capital corno en diversos lugares del país, que ha frenado numerosos proyectos concretos del imperialismo y la derecha.
De la misma manera y como efecto de la depredación neoliberal, proliferan los estallidos de inconformidad popular en varias partes del país: en Chiapas, en Atenco, en Oaxaca, en Michoacán, en Guerrero; se movilizan los electricistas, y de manera significativa dos sectores de trabajadores muy importantes: los mineros, que enfrentan la embestida más brutal de parte del gobierno y de algunas empresas mineras en contra de sus derechos laborales y en contra de su autonomía sindical.
Y el otro sector el de los maestros, quienes a raíz de la aprobación de la nueva Ley del ISSSTE que cancela derechos históricos y entrega su fondo de pensiones a los banqueros extranjeros, están llevando a cabo una movilización sin precedentes a fin de echar abajo esa ley y democratizar su sindicato.
Y los campesinos que se levantan contra al TLCAN y por la reorientación de la política agropecuaria. Y así muchos movimientos sociales y populares surgen y actúan, algunos de manera convergente, otros por separado; todos sin embargo, con el mismo trasfondo, la lucha contra el neoliberalismo y el imperialismo, aunque no todos lo proclamen así.
El caso de Oaxaca es muy significativo. En esa entidad se ha ido construyendo otro frente de masas, que tiene en común con los anteriores las mismas causas profundas. Entre sus aspectos singulares, está su origen concreto; un viejo problema laboral, la rezonificación por concepto de vida cara, que enfrentan, desde hace varios años, los trabajadores de la educación integrados en la Sección 22 del SNTE. Esa petición justa en lugar de atenderla fue reprimida de manera feroz y sangrienta por el gobernador Ulises Ruiz. Sin embargo, lo que no ha podido lograr la PFP y el gobierno casi lo han logran los partidos políticos electoreros, PRD, PT y Convergencia al maniobrar de manera oportunista tanto con la APPO como con Ulises Ruiz, en el proceso electoral pasado, lo que ha desembocado en división y paralización de su actividad.
El EZLN, que a fines de 2005 llamó a una movilización que denominó la “OTRA CAMPAÑA” se declaró anticapitalista y rompió con el aislamiento al que estaba sometido, desde los inicios del 2006 recorrió todo el país para informar e informarse de las condiciones de vida de los de abajo y preparar las condiciones subjetivas, para la lucha contra el régimen injusto en que vivimos; sin embargo, mantiene resistencia a establecer vínculos de lucha con los frentes de masas antiimperialistas, aunque muchas de las organizaciones que participan en la Otra también lo hacen en los diferentes frentes.
Luego del gran fraude electoral del dos de julio, cometido contra la voluntad del pueblo y de la desvergonzada actitud de Fox de apoyar ilegalmente al PAN y su candidato, afectando los intereses del candidato Andrés Manuel López Obrador, y que este llamó a la población al desconocimiento por ilegitimo, del gobierno surgido de esa elección; se puede valorar como positiva la posición postelectoral de López Obrador, porque si bien como candidato estuvo lejos de levantar un programa coincidente con el Nuevo Proyecto de Nación Alternativo al Neoliberalismo; luego del desenlace, se sale del marco de las “instituciones” creadas por el neoliberalismo y con ello se pudiera propiciar la posibilidad de una convergencia.
El común denominador de estos frentes, y otros de reciente formación, como el Frente Nacional por la Soberanía Energética, el Movimiento Nacional Organizado “Aquí Estamos” y las Asambleas Populares, en gestación, esta en la lucha contra las políticas neoliberales y contra su autor y beneficiario principal, el imperialismo.
Es claro que lo deseable seria que hubiera la más amplia unidad entre todos estos frentes, pero también es verdad que la unidad se construye, no surge de manera espontánea. Lo ideal seria que todos estos movimientos fueran el fruto de una planeación previa y tuvieran una dirección política única, pero eso no se logra cuando las fuerzas revolucionarias están dispersas, fuerzas a la que corresponderían la planeación y la dirección, como sucede todavía en realidad, nacional y local. En Zacatecas en el pasado hubo diversos intentos de unificar al pueblo y la clase trabajadora, sin embargo, no fructificaron. Fue a finales del año 2004 cuando después de varias jornadas de lucha y solidaridad con los compañeros del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS), trabajadores académicos y manuales de la UAZ, Telefonistas, del Cobaez, sindicatos pertenecientes a la Federación de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE), el Movimiento democrático del magisterio zacatecano de las secciones 34 y 58 y otras organizaciones sociales y populares iniciaron los esfuerzos tendientes a ir conformando un gran frente de masas y decidieron formar el Frente Estatal Social, Sindical, Campesino, Obrero y Popular (FESSCOP).
La experiencia de lucha de este frente dio lugar a que el 29 de septiembre del presente año el FESSCOP junto las secciones mineras zacatecanas pertenecientes al SNTMMySRM, a los exbraceros agrupados en Braceroproa, a la Asociación Nacional de Empresas Campesinas (ANEC), a los nuevos sindicatos como el de CONALEP, UTEZ, CECyTEZ y organizaciones de tianguistas de Zacatecas y Guadalupe, acordaran conformar un nuevo frente, todavía más amplio y representativo, sobre bases más sólidas desde el punto de vista organizativo, programático y en cuanto a sus objetivos de carácter histórico. Acordando cambiar el nombre de Frente Estatal Social, Sindical, Campesino, Obrero y Popular (FESSCOP), por el de Frente Social por la Soberanía Popular (FSSP) y convocar a su Asamblea Constitutiva para el día de hoy 20 de noviembre de 2007.

4.- OBJETIVOS
La lucha popular en nuestro país siempre ha estado guiada por el anhelo de la emancipación nacional respecto del extranjero, como condición primordial para alcanzar la justicia social y hacer efectivos sus derechos democráticos. Asimismo ha sido el pueblo trabajador -desde la Revolución de Independencia, la Revolución de Reforma hasta la Revolución de 1910-, el que ha impulsado la lucha, guiado por los próceres que supieron interpretar fielmente sus grandes anhelos.
El Frente, reconociendo que su origen es parte de esta lucha secular y que no habiéndose alcanzado aun las metas históricas, declara que su objetivo es llevarla adelante en las nuevas condiciones de México y del mundo, con plena convicción de que en alianza con fuerzas similares a la nuestra se podrán alcanzar de manera cabal.
Que en las condiciones actuales, el imperialismo representado por los monopolios transnacionales –principalmente norteamericanos- constituyen el principal obstáculo para que nuestro país pueda superar el atraso económico y social, por lo que la ruta del capitalismo clásico para llegar a la etapa imperialista le está vedado, partiendo de ésta premisa, el objetivo del Frente, cuando las condiciones objetivas y subjetivas creadas por la lucha popular lo permitan, será el de coadyuvar en alianza con las demás fuerzas populares a que nuestro pueblo arribe necesariamente a un régimen de vida superior, totalmente distinto basado en la justicia social, democracia popular y soberanía nacional.

5.- DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS
Por todo lo anterior el Frente declara:
Que sólo en un sistema de democracia popular se puede alcanzar los objetivos históricos de la Revolución Mexicana y convertir en realidad los postulados avanzados de la Constitución General de la República, porque la democracia popular consiste en excluir del poder público, a los representantes de la oligarquía nacional y extranjera y, a los elementos que se han enriquecido al amparo de los puestos públicos y la corrupción.
Que para hacer efectiva la democracia popular, el gobierno debe integrarse con representantes auténticos de la clase trabajadora de la ciudad y del campo, de la intelectualidad avanzada, de la pequeña burguesía rural y urbana, de los sectores de la burguesía nacional que no estén ligados al imperialismo, bajo la dirección de la clase trabajadora.
Que el enemigo común de todos los pueblos de la tierra es el imperialismo, y que esto se hace más evidente entre los pueblos de América Latina, por lo que es vital sostener una solidaridad y apoyo mutuo permanente, así como encontrar las vías para hacer realidad los sueños de los grandes próceres de nuestro continente: construir la Patria Grande.
Que la solidaridad entre los pueblos no significa la intervención de los gobiernos de sus países en los asuntos internos de otros y que en la lucha común por alcanzar un régimen de vida superior, cada pueblo habrá de encontrar sus propias vías de desarrollo.
-Que el imperialismo con todo su poderío militar, político y económico, no ha vacilado en utilizar todas las formas de intervención con el fin de mantener y restablecer su dominación, por lo que se sumará a la exigencia mundial y nacional por el desarme total y completo; por el respeto al derecho de autodeterminación de los pueblos y a la no intervención en sus asuntos internos.
-Que la vida del mundo y de nuestro país es cambiante, lo que obliga a analizar y estudiar la realidad de manera permanente, con el fin de que nuestro Programa responda siempre a las condiciones concretas de la etapa que estemos viviendo.
-Que será ajeno al dogmatismo, que pretende convertir las tesis, y principios en normas válidas de una vez y para siempre. Ajeno al sectarismo, que niega la necesidad de las alianzas con otras fuerzas políticas y sociales para el logro de ciertos objetivos concretos.
-Que se esforzará por unificar grupos, organizaciones y ciudadanos, de nuestro estado y del país hasta lograr fundirse en una gran Frente Nacional Patriótico, Democrático y Antiimperialista, sobre la base de un programa colectivamente discutido y aprobado, que tenga en cuenta la realidad nacional.
-Que con base en estos principios, el Frente formulará su programa general, sus demandas inmediatas, organizará su actividad permanente, estudiará cada problema, y construirá su organización a nivel estatal y se fundirá en el crisol del movimiento nacional.

6.- PROGRAMA
El Frente considera que es parte del torrente nacional que lucha por la transformación del régimen social que prevalece en nuestro país, por un régimen más justo y soberano. Esto constituye su finalidad histórica, sin embargo para alcanzarla, aportará su esfuerzo para defender todo lo positivo alcanzado hasta ahora y plantear la solución que a los intereses populares y sociales convenga de los problemas que afectan las condiciones de vida del pueblo.
Por lo tanto, luchará por mantener y reforzar las instituciones del Estado encargadas de la educación, la salud, la vivienda, el campo. Defender y consolidar las empresas y ramas de la economía estratégicas para la soberanía y el desarrollo propio que no han pasado a manos privadas; rescatar las que fueron privatizadas, sobre todo aquellas entregadas al capital extranjero.
Contribuirá en la lucha por liberar al país de la sujeción imperialista, rechazando toda política que atente u obstaculice la independencia económica respecto del extranjero.
Contribuirá a todas las políticas que tiendan a mejorar las condiciones de vida de las masas populares; aumentar sus recursos; liquidar el analfabetismo; preservar y mejorar los servicios sociales y de salubridad; mejorar cuantitativa y cualitativamente la educación y formar los cuadros medios y superiores para el progreso del estado y de la Nación; defender y acrecentar nuestra cultura; instaurar un auténtico régimen democrático; recuperar los principios progresistas de la Constitución; que han sido derogados, defender y consolidar los que aun se conservan y aplicar unos y otros en sentido revolucionario.
Exigirá la diversificación del comercio con el exterior, hacia todos los mercados del mundo, de acuerdo con el principio del beneficio mutuo y sin condiciones políticas.
Mantendrá permanentemente la exigencia de incrementar las relaciones del pueblo mexicano con todos los pueblos del mundo e impulsar la integración con los de América Latina y el Caribe,
En síntesis, el Programa permanente del Frente consiste en elevar las condiciones de vida del pueblo para que atenga acceso pleno a todos los bienes de la civilización y la cultura, el desarrollo económico independiente de la Nación, y la instauración de un verdadero régimen democrático.

7.- ORGANIZACIÓN Y FUNCIONAMIENTO
El Frente es un conjunto de fuerzas sociales, sindicales, democráticas, populares y revolucionarias, que se ha conformado de manera voluntaria y tienen objetivos comunes en el orden económico, político, social y cultural.
EL Frente, se mantendrá independiente del gobierno, de la clase dominante y partidos políticos, sin que esto impida la libre militancia política de sus miembros.
El Frente es producto de un largo camino que el pueblo zacatecano ha recorrido a lo largo de su historia, y las fuerzas que lo conforman están conscientes del rol histórico que le corresponde jugar, por lo tanto su accionar tendrá como fundamento: el principio de la dirección colectiva; la democracia interna; la actividad y la iniciativa constante de sus componentes colectivos e individuales; la crítica y la autocrítica; el más esmerado cuidado a la cohesión en sus filas y por la disciplina consciente de quienes lo integran.
El Frente mantendrá el más absoluto respeto a la autonomía y vida interna de las organizaciones que lo conforman, así como de las demás organizaciones sociales y sindicales. En caso de que alguna organización miembro del Frente, atraviese por conflictos internos y haya disputa por la dirección, el Frente se mantendrá al margen de ellos.
EL Frente analizará y discutirá sin cortapisas todos los asuntos que tengan que ver con la vida interna del mismo y con el cumplimiento de tareas y objetivos, hasta que se considere que los acuerdos puedan ser tomados por consenso. Una vez tomados los acuerdos deben ser respetados y la discusión debe cesar.
El Frente educará a sus componentes colectivos e individuales en el más acendrado patriotismo, la solidaridad internacional, la fraternidad entre todos los pueblos de la tierra, de la integración de los pueblos de América Latina y sostendrá relaciones con todos los movimientos y partidos, estatales, nacionales y extranjeros que con los que tenga coincidencias en su declaración de principios, objetivos y programa

8.- ESTRATEGIA Y TÁCTICA
La estrategia consiste, lo mismo tratándose de las luchas políticas que de los conflictos armados y económicos, en aumentar las fuerzas propias y el número de aliados. Consiste, por tanto, en tratar de disminuir las fuerzas del adversario y restarle al máximo sus aliados posibles. Respecto de la lucha de clases, no sólo en la teoría sino en la experiencia viva, la estrategia, consiste para la clase trabajadora y las organizaciones sociales y políticas que la representan, en unir al proletariado, a los campesinos, y a los demás sectores explotados del pueblo, en acciones comunes para lograr reivindicaciones reclamadas por todos ellos. Esta unidad en la acción es la única que puede conducir a la clase trabajadora a la construcción de la unidad orgánica. En cuanto a la estrategia relativa a la lucha de la nación contra el imperialismo, la alianza de sectores afines, concreta o permanente, es la aconsejable. Por sectores afines debe entenderse los que chocan contra los intereses y propósitos del imperialismo. En la lucha de clases la alianza es más fácil porque se trata de sectores de una sola clase social, que no tienen contradicciones internas. En la lucha contra el imperialismo, la alianza es más difícil, porque se trata de sectores afines sólo en la acción común por la independencia económica de nuestro país, que tienen contradicciones entre sí por estar formados por clases sociales antagónicas. Este hecho no impide, sin embargo, la acción común, como también la experiencia lo ha probado en numerosos casos de importancia a lo largo de nuestra historia.
La táctica consiste en saber emplear, en el momento oportuno, las fuerzas propias y las aliadas, para alcanzar los objetivos que se persiguen. Las organizaciones sociales y políticas de los trabajadores tienen la mayor responsabilidad en esta materia.
La táctica de todos los referentes de la lucha antineoliberal consiste en la acción unitaria; en lograr la cohesión, la articulación entre todos, para actuar sincronizadamente en el momento oportuno. Las organizaciones sindicales, sociales y populares que hemos venido construyendo el Frente Social por la Soberanía Popular, bajo un tenaz y persistente proceso acumulativo de fuerzas y objetivos comunes, compartimos la mayor responsabilidad, en esta tarea.
La táctica del frente único ha sido concebida dentro del movimiento social, como una Organización de Organizaciones, el frente único puede tener nombre propio o no tenerlo, lo importante es que, represente la culminación de un largo proceso de construcción de una alternativa de unidad, tejida para alcanzar nuestra independencia económica.
La lucha de las organizaciones sociales, civiles y políticas ha de consistir en la conquista de la independencia económica de la nación, sin la cual la independencia política no es posible, pero no se podrá lograr sin un gran movimiento en el que participen de un modo activo, consciente e infatigable, los grandes sectores del estado de Zacatecas y de la nación y basará sus trabajos en acuerdos colectivos con pleno respeto del interés común, y con pleno respeto a los integrantes del frente, sin atentar contra su diversidad.

9.- POLÍTICA DE ALIANZAS
Nuestra Asamblea reconoce la imperiosa necesidad de trabajar de manera conjunta con otras organizaciones que tengan la misma sensibilidad y compartan nuestro punto de vista, en cuanto a la tarea de contribuir a preservar, orientar, educar políticamente al pueblo y la clase trabajadora y también ayudar a mejorar la articulación entre todas la agrupaciones que confluyan en los diversos frentes que existen en nuestro país y de los diversos frentes entre si: Diálogo Nacional, La Otra Campaña, Convención Nacional Democrática, etc.
Una política de amplias alianzas entre las capas trabajadoras y populares del país se debe fundamentar en: 1.- Acción conjunta, 2.- Que influya sobre las masas no organizadas, 3.- Que infunda fe en la fuerza del movimiento democrático-revolucionario, 4.- Que encauce la lucha por el derrocamiento del régimen, 5.- En defensa de nuestros intereses económicos, 6.- Que parta del principio de lucha contra el imperialismo y el fascismo, 7.- Por la defensa de las conquistas y organizaciones populares, 8.- Que encauce la lucha hacia la huelga nacional, 9.- Que contribuya a la educación política popular en el más amplio espíritu unitario, 10.- Que se apoye en una plataforma general para las acciones, 11.- Que sea un bastión de organización por una nueva sociedad.
Para ello, nos toca contribuir a que no haya disputas ni enfrentamientos entre unos y otros, a que caminen hacia la unificación de todos en la medida de lo posible y, en tanto no se pueda, por lo menos a que avancen por caminos paralelos. Nos toca trabajar con todos y en todos, buscando establecer siempre la relación más cordial y contribuir a que alcancen los mejores logros, manteniendo siempre cada una de nuestras organizaciones su independencia con respecto de líderes y agrupaciones que confluyen en estos frentes, expresando nuestros puntos de vista con franqueza y fraternidad.
El Frente debe apoyar y colaborar con todos los que compartan nuestros ideales, la lucha antineoliberal, antimperialista y anticapitalista en Zacatecas, en México y el mundo. En el caso de nuestro estado es una tarea fundamental del Frente la de contribuir a la construcción de un gran bloque social amplio e incluyente, que vaya construyendo poder popular en todos los niveles, hasta rescatar plenamente la soberanía popular.

10.- PLAN DE ACCIÓN
Consecuencia, de todo lo anterior el Frente sostiene que para impedir una nueva ola de ataques neoliberales contra la nación, restituir la legalidad Constitucional, forjar la soberanía popular y detener la mano del autoritarismo de la derecha, las organizaciones que lo conformamos debemos observar lo siguiente:
1.- Comprometernos a realizar nuestros máximos esfuerzos para detener todas las políticas neoliberales pues lesionan las condiciones de vida y de trabajo, los derechos políticos y libertades democráticas del pueblo y los trabajadores mexicanos, así como defender sin condiciones, el Patrimonio, la soberanía política y la independencia económica de nuestra Patria.
2.- Comprometernos a dar la más amplia solidaridad y respaldo político a cada una de las organizaciones, movimientos sindicales, sociales, populares, indígenas, campesinos y políticos, que formen el Frente.
3.- Trabajar para lograr la más amplia unidad de acción, a partir de los programas formados por las diversas luchas y expresiones del pueblo.
4.- Trabajar juntos para crear las condiciones para el surgimiento de un nuevo gobierno emanado verdadera y democráticamente del pueblo, que responda a él en todo momento, restaurando la legalidad Constitucional y el espíritu fundacional del Constituyente de 1917, así como los valores esenciales de la Nación Mexicana.
5.- Efectuar y establecer, acercamientos y relaciones fraternas con todas aquellas organizaciones y personalidades, democráticas, progresistas y honestas del estado y del país.

I. GENERAL
1.- La lucha contra las llamadas “reformas estructurales” que no son otra cosa que la pretensión del gobierno neoliberal y del imperialismo yanqui de privatizar el petróleo, la energía eléctrica, la reforma fiscal y la flexibilización laboral, así como continuar desmantelando la seguridad social y el sistema educativo nacional, que de consumarse trastocarían las bases del estado nacional para convertir a nuestro país en una colonia norteamericana.
2.- Apoyar a los trabajadores al servicio del Estado en su lucha contra la nueva Ley del ISSSTE, que los obliga a laborar más años, cotizar más y a recibir menos pensión, y que entrega el fondo de pensiones a los banqueros extranjeros, organizando otra etapa de amparos.
3.- Detener la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en lo referente al maíz y frijol, ya que estos granos podrán entrar a nuestro país libre de aranceles, lo que llevará a la ruina total a los productores nacionales, así como también traerá consigo la pretensión de sembrar maíces transgénicos en México; y el cumplimiento del compromiso de George W. Bush con la industria automotriz norteamericana para fabricar etanol a partir del maíz, lo que amenaza la calidad, la cantidad y el precio de todos los alimentos que dependen del mismo. Convencidos que esta lucha concluirá hasta echar a bajo el TLCAN en su totalidad.
4.- Rechazar de manera contundente la intromisión del gobierno, patrones y partidos políticos en la vida interna de las organizaciones sindicales, locales y nacionales.
5.- Llevar a cabo las movilizaciones que sean necesarias para alcanzar los objetivos aquí planteados, y las demandas que la clase trabajadora y el pueblo mexicano en general vienen enarbolando, con el fin de mejorar sus condiciones de vida, instaurar un verdadero régimen democrático y lograr la liberación nacional definitiva.

II. LOCAL
1.- Fortalecer la Campaña Nacional en Defensa de la Soberanía Alimentaria y la Reactivación del Campo Mexicano: “Sin maíz no hay país y sin frijol tampoco” para sacar al maíz y el frijol del TLCAN. Y apoyar la demanda de este sector por mayores recursos y apoyos para los campesinos pobres en Zacatecas, tanto para la producción como para garantizar la comercialización de sus productos.
2.- Solidarizarse con las luchas que llevan a cabo los trabajadores mineros zacatecanos, que enfrentan la embestida del gobierno ilegítimo y fraudulento de Felipe Calderón en complicidad con las compañías mineras para acabar con su organización sindical y con sus derechos laborales.
3.- Solidarizarse con los trabajadores del sector educativo que se han organizado en sindicatos en diferentes instituciones: UTEZ, CECyTEZ, CONALEP, UPZ, etc., y que están peleando porque se les reconozcan sus derechos más elementales, en condiciones de indiferencia y despotismo por parte de las autoridades locales.
4.- Solidarizarse con los trabajadores ex-braceros, que en estos momentos están luchando porque se le devuelvan sus ahorros, que el gobierno sin causa justificada les escamotea, pretendiendo pagar una mísera cantidad y sólo a unos cuantos.
5.- Lograr que el gobierno del estado utilize los recursos financieros que estaban destinados para la construcción del llamado viaducto o segundo piso en la zona conurbada Zacatecas-Guadalupe, una vez que se ha cancelado este proyecto; para desarrollar un sistema de transporte público intermunicipal, que no contamine, efeciente, suficiente y barato para desalentar el uso de transporte privado.
7.- Exigir al gobierno del estado que establezca de inmediato los lineamientos de una política laboral respetuosa de los derechos laborales de los trabajadores al servicio del gobierno del estado, con la cual se instruya a las autoridades gubernamentales, que contemple:
a) Libertad irrestricta para que los trabajadores dentro del marco de la Ley puedan hacer efectivos sus derechos.
b) Establecer un mínimo de apoyo material, económico y humano para cada una de las organizaciones sindicales que se formen, a fin de que los dirigentes puedan cumplir cabalmente con sus obligaciones.
c) Cese inmediato de las medidas represivas e intimidatorias contra los trabajadores que se decidan a organizar en sindicatos.
d) Reinstalación inmediata del Prof. Hugo Rodríguez Villarreal en su puesto como docente de la Universidad Politécnica de Zacatecas.
e) Cese inmediato de las autoridades que atenten contra los derechos laborales de los trabajadores.
8.- Solicitar al gobierno del estado que proponga a la Legislatura Local la inmediata derogación del impuesto estatal sobre tenencia vehicular. Asimismo, que el impuesto por el reemplacamiento tenga un carácter progresivo, es decir, debe ir orientado a que el lujo sea gravado y no la necesidad. Y que este reemplacamiento se lleve a cabo de manera planeada y no sólo para obtener mayores recursos.
9.- Proponer al gobierno del estado la construcción de un hospital que dé atención de Tercer Nivel a los zacatecanos, pues a la fecha ninguna de las instituciones de salud, cuenta con este servicio, ocasionando que los pacientes que requieren una atención de su especialidad sean trasladados a otros estados, generando gastos muy elevados que la inmensa mayoría de quienes requieren ésta atención no puede sufragar.
10.- Exigir el establecimiento de una política social, por parte del gobierno del estado que proteja a los sectores populares, asegure el acceso a los bienes y servicios básicos y se impida el incremento en los precios de los servicios públicos, privados y de la canasta básica.
11.- Que en el caso de la construcción de Proyecto Ciudad Argentum, el gobierno del estado dé instrucciones a quien corresponda para:
a) cuidar el impacto ambiental y prevenir cualquier afectación en su salud a los trabajadores o a los futuros ocupantes de la nueva ciudad.
b) Llevar a cabo las negociaciones necesarias para que las empresas que se han contratado empleen mano de obra zacatecana y den oportunidad a los jóvenes estudiantes y egresados de las instituciones de educación que cubran el perfil para que se les dé empleo.
c) Que a todos los trabajadores que se empleen en dicho proyecto, se les respeten sus derechos laborales y sociales.

ZACATECAS, ZAC., A 20 DE NOVIEMBRE DE 2007

Fundadores e Integrantes del Frente Social por la Soberanía Popular:
Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE); Sección 46 del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STRM); Sección 34 del SNTE-CNTE; Sindicato Único de Trabajadores de la UTEZ (SUTUTEZ); Sindicato Único de Trabajadores de CONALEP (SUTACZ); Sindicato Único de Personal Docente y Administrativo de COBAEZ (SUPDACOBAEZ); Sindicato de Trabajadores de la UAZ (STUAZ); Coordinadora del Magisterio Democrático de Zacatecas, Secc. 58; Sindicato de Trabajadores de CECyTEZ (STCECyTEZyEMSAD); Sindicato de Trabajadores de Confianza de CECyTEZ (SITCOCECyTEZ); Secciones 95, 201, 166 y 62 del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros; Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana (SNTMMySRM); Sección 59 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la SEMARNAT (SNTSEMARNAT); Sección 29 del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS); Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras de Productores del Campo (ANEC); Movimiento del Sindicalismo Revolucionario (MSR); Frente Nacional de Organizaciones Braceroproa, A.C.; Asociación Civil “5 de Mayo de Guadalupe y Zacatecas; Solidaridad Cívica Zacatecana, A. C.; Agrupación Política Nacional (APN) “Nueva Democracia”; Promotora por la Unidad Nacional Contra el Neoliberalismo (PUNCN); Federación de Organizaciones Sociales del Estado de Zacatecas-Movimiento Avance por la Democracia (FOSEZ); Barzón Zacatecas; Frente Popular de Lucha de Zacatecas-Coordinadora Nacional Plan de Ayala (FPLZ-CNPA); Jóvenes por el Socialismo (JPS); ACCUR; Integradora Estatal de Productores de Frijol; Comercializadora “Alfonso Medina” SPR de RI; E.I.S.A.; Enlace al Campo SPR de RI; La Otra Cultura; Los Ejidos SPR de RI; Vaqueros de La Cocinera SPR de RI; Tianguis La Campesina.